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Teórico Alain Bergala expuso su “hipótesis del cine"

10 Noviembre 2014

Exdirector de la revista “Cahiers du Cinema” participó en un seminario en la Facultad de Arquitectura.

El destacado cineasta, teórico y académico francés Alain Bergala expuso su conferencia “Hipótesis del cine” en la Facultad de Arquitectura UV, en el marco del seminario “Cine en la Escuela”, organizado por el ICEI de la Universidad de Chile. En la oportunidad, Bergala se refirió al proceso de enseñanza del cine en la educación básica, media y superior en Francia.

Bergala, exdirector de la revista Cahiers du Cinema y responsable del diseño de la política pública de la introducción del cine en la escuela en Francia, señaló que “una educación en el cine es un desafío político de la sociedad, tengo la sensación de que en Chile hay un contexto que está preparado y listo para se transforme en algo importante. Para esta sociedad la educación del cine es muy relevante, en Santiago vi gente que hace muchas cosas y esperan una voluntad del poder político, eso va bien. Estuve con la ministra de la cultura y se nota interesada en esto”.

El teórico francés agregó que “la escuela no es un circuito aislado de la sociedad o de la historia, en este sentido, Francia es el país en el mundo donde la educación en cine está más desarrollada, porque hay una historia que ha permitido que el cine sea algo muy importante en la escuela primaria, el liceo y la universidad, es un país donde el cine tiene su lugar”.

Según Bergala “este proceso comenzó durante la guerra del 39 al 45, con un gran movimiento de resistencia contra Alemania y los nazis. En ese momento la resistencia eran los comunistas y los católicos, quienes combatieron juntos en la resistencia, a pesar que antes de la guerra no se hablaban y se consideraban rivales, pero debieron aprender a combatir y vivir juntos. Cuando la guerra terminó se decidió que nunca más debían ocurrir los campos de concentración, ni la carnicería de los enfrentamientos y se llegó a la conclusión de la necesidad de contar con una educación popular”.

“En la época de la postguerra en Francia no había hijos de obreros en la universidad, era muy difícil acceder a la cultura, al saber, entonces movimientos como Trabajo y Cultura, o Pueblo y Cultura, se preguntaban con qué educar al pueblo y los obreros, y decidieron que el cine sería la herramienta, porque era inmediatamente accesible, era formidable, ya que todos comprendían, no era ni la música, ni literatura, ni el arte. Eso dio lugar a federaciones de cine club, en todos lados, pero se detuvo brutalmente a consecuencia de la TV que mostraba muchas películas y la gente prefería quedarse en su casa, por lo que el movimiento en general del cine club se detiene”, agregó.

Bergala añadió que “durante los años 80 existió una voluntad política, el sistema educativo tomó el relevo y el cine entró al colegio y a la universidad, gracias a las iniciativas del ministro de cultura Jack Lang, de quien es posible decir que salvó al cine francés, de la crisis general que hubo no solo en Francia, sino en toda Europa. En Italia por ejemplo, de 60 películas que se hacían al año, pasaron a producir 3”.

“En ese contexto, Lang desarrolló sistemas de cuotas en el cual se obligaba a pasar ciertas películas del cine francés y además instauró modalidades de ayuda del Estado a la producción de los cineastas, incluso muchos cineastas extranjeros llegaron a París, que se convirtió en un lugar de producción francesa y de otros países, por lo que el cine fue preservado. Al entrar el cine al sistema escolar, se desarrolló luego el bachillerato en cine, ya que inmediatamente después de mayo del 68 el cine llegó a la universidad, con una enseñanza autónoma”.

Según Bergala, “Lang creía necesario que los niños y jóvenes fueran al cine en sus horas de clase y que las escuelas pudieran inscribirse en el programa, mientras que los profesores se comprometían a llevarlos tres veces al año a una sala de cine, donde trabajan en base a las películas. En ese contexto Lang me pide que me haga cargo de ver nuevas maneras de poder introducir el cine en la escuela primeria. Creo que la edad más importante para encontrarse con el cine, es cuando más pequeño, después de los 12 años ya no es lo mismo, por eso era relevante trabajar con la escuela primaria”.

De esa forma Bergala creó el dispositivo Cine Cien Años de Juventud. “Fue en el año 1995, cuando se celebraba los cien años del cine, se trata de un método diseñado para que otros también lo pudieran usar, una estructura principios, donde toda la sociedad francesa fuera representada y participaran estudiantes de París, del campo, del sur y norte, de la periferia, de todas las edades, desde el jardín, hasta los últimos años del liceo. Es la misma pedagogía para el pequeño o el adolescente, lo que cambia son los filmes, incluso el dispositivo comenzó a ir a otros países, como España, Brasil”, explica Bergala.

El teórico francés aseguró que su dispositivo “permite a los estudiantes mirar pequeños fragmentos de películas y realizar breves ejercicios individuales, con la metodología del plano lumiere, es decir una película que dura 52 segundos, entonces cada niño debe reflexionar donde poner la cámara y en qué momento va a apretar el botón de grabar, porque sabe que sólo tiene un minuto, por lo que debe saber dónde detenerse. La pedagogía consiste elegir los extractos que ven los estudiantes y encontrar los aspectos comunes y diferentes que surgen en ellos”.