Fonoaudiólogo Felipe Muñoz es el primer graduado del programa de Doctorado en Ciencias e Ingeniería para la Salud de la UV
El fonoaudiólogo e investigador Felipe Muñoz se transformó en el primer graduado del programa de Doctorado en Ciencias e Ingeniería para la Salud de la Universidad de Valparaíso, tras defender con éxito la tesis “Efectos del estrés crónico en la dinámica cerebral de la atención selectiva y la memoria de trabajo durante la inhibición a estímulos auditivos”.
El profesional rindió y aprobó su examen de grado con distinción máxima, ante una comisión que estuvo conformada por los académicos y doctores Paul Délano (Universidad de Chile), Carolina Méndez (Pontificia Universidad Católica de Chile) y Pavel Prado (Universidad San Sebastián), y que también integraron sus profesores guías, los doctores Pablo Moya (Facultad de Ciencias UV), Jean Gabriel Minonzio (Facultad de Ingeniería UV) y Gonzalo Terreros (Universidad de O'Higgins).
En la ocasión también estuvieron presentes la directora de Postgrado y Postítulo de la UV, Angélica Mosqueda; el director del doctorado, Sebastián San Martín; parte de su claustro de académicos; estudiantes, y la madre del graduado, Julieta Muñoz.
“Haberme titulado de este programa es para mí la culminación de un exigente pero satisfactorio proceso formativo que inicié en el pregrado, en la Escuela de Fonoaudiología de esta casa de estudios, que luego continué al cursar el Magíster en Ciencias Biológicas, con mención en Neurociencia, y que coroné con la obtención del grado de doctor en Ciencias e Ingeniería para la Salud”, afirmó Felipe Muñoz.
Orgullo de pionero
El nuevo doctor de la Universidad de Valparaíso comentó que ser el primer titulado de este doctorado representa para él un orgullo, que se acrecienta aún más por el hecho de que con ello siente ha podido aportar a su avance y consolidación.
En efecto, Muñoz fue parte de la primera cohorte de estudiantes de este programa de postgrado, que desde 2019 imparten de manera conjunta las Facultades de Medicina, de Ciencias y de Ingeniería de la UV, y como tal asumió los desafíos que enfrenta todo pionero.
“Diría que en esto se dio una relación de confianza mutua. Yo le confié a la Universidad y a este doctorado mi formación y ellos confiaron en mí. Tuve el privilegio de contar con el apoyo y guía de profesores de excelencia, que siempre demostraron genuino interés y una gran disposición por ayudarme en mi trabajo de investigación. Cuando uno estudia una carrera del área de la salud se enfrenta a problemas que trasuntan la formación que uno recibe en la propia disciplina. De eso se hace cargo este doctorado, por su orientación interdisciplinaria y, desde luego, por entregar herramientas para que uno pueda aportar —posteriormente—, desde su experiencia y conocimientos, al desarrollo de diferentes disciplinas a nivel clínico y, desde luego, a la salud y el bienestar de las personas, que en definitiva es lo más importante”, aseguró Felipe Muñoz.
Objetivo de la investigación
La tesis defendida por el primer graduado del Doctorado en Ciencias e Ingeniería para la Salud de la UV, titulada “Efectos del estrés crónico en la dinámica cerebral de la atención selectiva y la memoria de trabajo durante la inhibición a estímulos auditivos”, se enfoca en saber cómo los efectos de esa condición impactan en las personas.
“El desafío que me propuse fue averiguar de qué manera el estrés afecta nuestra capacidad para enfocarnos y retener información en momentos determinados, así como, también qué dificultades se presentan y cómo el cerebro funciona en eso instantes”, acotó Felipe Muñoz.
El profesional precisó que uno de los hallazgos de interés de esta investigación radica en la comprobación del hecho de que el cerebro logra hacer que la gente estresada rinda muchas veces más allá de las capacidades que habitualmente cree tener, aun cuando, como contrapunto, ello implique posteriormente para ellas una mayor fatiga y cierta pérdida en algunos niveles de funcionalidad, los cuales, de mantenerse a largo plazo, podrían generar un deterioro cuyos efectos hay que continuar explorando para saber cómo se comportan al final.
“Sin duda, este trabajo es apenas el principio de una investigación en un ámbito en el que todavía resta mucho por conocer”, concluyó Muñoz.
Momento cúlmine
La obtención del grado de doctor por parte del fonoaudiólogo Felipe Muñoz fue valorada de gran manera por el director del Doctorado en Ciencias e Ingeniería para la Salud, Sebastián San Martín, quien sostuvo que el momento cúlmine de todo programa de este tipo es la graduación de cada investigador o investigadora que ha decidido formar.
“Haber podido concretar esta primera defensa de tesis es para nosotros un hito histórico; uno que proyectamos hace cinco años, cuando este doctorado se formuló, y que no es otro que formar investigadores a nivel regional y nacional para el siglo XXI que sean capaces de generar e integrar nuevos conocimientos y, por cierto, aportar soluciones concretas y de alcance global a los problemas del área de la salud, mediante un enfoque interdisciplinario.
En línea con lo anterior, San Martín destacó el trabajo que el ahora doctor Felipe Muñoz logró desarrollar durante su permanencia en el programa, y que le permitió incorporar herramientas del área de las Ciencias y de la Ingeniería para complementar su formación en salud y trabajar en el proyecto que realizó y que le permitió vincular su formación fonoaudiológica a temas de estrés y el estudio de ondas cerebrales vinculadas a cómo responden las personas de manera voluntaria e involuntaria, frente a cierto tipo de tareas.
Aporte a la acreditación
Otro aspecto relevante vinculado a la primera defensa de tesis del Doctorado en Ciencias e Ingeniería para la Salud de la UV, y que su director quiso destacar de manera especial, es que este hecho implica un aporte al proceso de revalidación de su acreditación.
“En efecto, este programa obtuvo su primera acreditación en 2021, por el tiempo máximo de tres años, en función de no tener egresados. Por consiguiente, con la graduación del doctor Felipe Muñoz, ahora podremos aspirar a ampliar ese período de años. Esto adquiere una gran relevancia en estos momentos, por cuanto el doctorado se encuentra en plena revalidación de su acreditación, por lo que este hito ya fue informado a la comisión de pares a cargo del actual proceso. Estamos optimistas y confiamos que esto nos permita avanzar y mejorar en este indicador”, cerró Sebastián San Martín.
Nota: Gonzalo Battocchio