El equipo tendrá reuniones semanales con el fin de elaborar el próximo informe de autoevaluación con miras a la acreditación de la carrera.
Con el objetivo de empezar a desarrollar el trabajo en pos de acreditar la carrera de Derecho de la Universidad de Valparaíso, se constituyó recientemente el Comité de Autoevaluación para el proceso de acreditación de este año 2024.
El equipo es coordinado por la profesora Patricia Reyes, y está integrado por la académica Soledad Fernández, quien es la secretaria ejecutiva; los docentes Claudia Cozzani, Matías Rodríguez, Cristina Bonifaz y Claudio Cuellar; las coordinadoras administrativas de la Facultad y la Escuela de Derecho, Angélica Jofré y Claudia Silva, respectivamente, y la vicepresidenta del Centro de Estudiantes de Derecho, Francisca Romero. En la reunión participó además el director de Autoevaluación de Acreditación de la UV, Álvaro Jeria, y la profesional de la Dirección General de Desarrollo Institucional y Aseguramiento de la Calidad de la UV, Francisca Ramírez.
Reunión
Al inicio de la reunión —momento en que estuvo presente la vicedecana de la Facultad de Derecho, Inés Robles—, la profesora Patricia Reyes explicó el contexto y el origen del comité, así como sus objetivos y funcionamiento, detallando los procesos previos a la acreditación por el Comité de Autorregulación y la importancia del informe de Autoevaluación que debe emanar desde el Comité de Autoevaluación.
En esta línea, destacó que el principal rol del comité es presentar un informe de autoevaluación, para lo cual desde la UV se ha determinado un proceso definido y estándares para la generación de este, considerando instrumentos y análisis automatizados. En este sentido, se planteó la experiencia del último proceso de autoevaluación, y se conversó en torno a los mecanismos y nudos críticos el proceso.
El informe de autoevaluación cuenta con un índice que aborda los distintos niveles, y se estructura con objetivo general, objetivos específicos, perfil de egreso, competencias y resultados de aprendizaje. Su metodología consiste en discutir los criterios, proceso a partir del cual se obtendrá una síntesis evaluativa de cada uno, desarrollando así un relato de cada nivel.
La profesora Patricia Reyes señaló al respecto que “este proceso de autoevaluación que comenzamos permite a la carrera evaluar la calidad de la enseñanza que está entregando a sus estudiantes. En nuestro caso, que tenemos una carrera acreditada por siete años —el máximo que se otorga por las agencias acreditadoras— significa que nuestra comunidad valida un nivel de excelencia en nuestro quehacer en todas las áreas: gestión, docencia, investigación y vinculación con el medio, y que cumplimos, en consecuencia, con lo que prometemos a quienes eligen nuestra formación”.
“Lo anterior no significa de ninguna forma que en el proceso no nos encontraremos con aspectos que deban ser mejorados, pues esta autoevaluación —que luego será revisada por una agencia externa—, además de relevar las fortalezas que tiene la carrera, también permite detectar oportunidades para realizar una mejora continua de nuestras actividades. Es entonces el momento para reflexionar internamente —estudiantes, académicos y funcionarios—, al igual que para preguntar a nuestros exestudiantes, empleadores y socios estratégicos, sobre cómo lo estamos haciendo y cómo ven ellos el resultado de la formación y de los servicios que entregamos. Por ello, es muy importante contar con la más amplia participación en este proceso, y que todos se sumen para que podamos seguir asegurando el nivel de excelencia y calidad en la enseñanza del Derecho que nos caracteriza”, cerró.
Acreditación por siete años
La carrera de Derecho de la UV se acreditó en 2018 por siete años —el máximo posible en Chile— hasta el 18 de enero de 2025, por el Consejo de Acreditación del Área de Derecho de la agencia acreditadora ADC. La acreditación correspondió a una certificación de calidad de sus procesos internos y resultados, consolidando más de 110 años de reconocida historia y prestigio institucional.
La unidad académica se encuentra en un activo proceso de modernización, destinado a compaginar su propósito permanente de entregar una formación jurídica de calidad en un ambiente de tolerancia, pluralismo y libre de todo tipo de dogmatismos, con los requerimientos de innovación, flexibilidad y dinamismo propios de la sociedad de la información en la que actualmente vivimos.
Para tal efecto, se ha puesto énfasis en el perfeccionamiento de los académicos, en la formulación de una oferta coherente de postgrados y postítulos y en la renovación de los programas y planes de estudios.
Nota: Camila Cortez
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