En la sala El Farol del Centro de Extensión de la Universidad de Valparaíso tuvo lugar la apertura de la convocatoria para el XLV Concurso Nacional de Arte Joven, certamen que organiza la casa de estudios con el fin de entregar espacios de expresión a las y los creadores visuales de hasta 35 años.
La actividad fue encabezada por el director de Extensión y Comunicaciones de la UV, Osvaldo Bizama, y el director del Concurso Nacional de Arte Joven, Rafael Torres. Los acompañaron quienes integran el jurado de la presente versión: Javiera Moreira, grabadora; Pablo Tomasello, fotógrafo, y Álvaro Miranda, artista visual y académico.
En la ocasión, Osvaldo Bizama expresó su satisfacción por esta convocatoria: “Sin duda este certamen expresa el compromiso que la Universidad tiene con la difusión del arte y de la cultura, no sólo de la Región, sino del país. Este es el concurso más longevo en su especie en el país, probablemente el más importante; ha sido una verdadera vitrina de en su momento jóvenes artistas, muchos de ellos y ellas consagrados actualmente”, dijo.
Asimismo, añadió, “tenemos muchas expectativas de una alta participación. Además, este año volvemos a la presencialidad plena; la recepción de obras se va a realizar de manera física, tanto aquí en la sala El Farol como en nuestro Campus Santiago, y por envíos desde todo el país. De verdad estamos muy esperanzados en tener una muy alta participación”.
El director del concurso señaló: “Estamos muy contentos de convocar al 45° concurso, lo que habla de una larga historia y trayectoria de este certamen en materia de artes visuales”, y destacó el retorno de la postulación presencial, que se verificará en el Centro de Extensión, en Valparaíso, y en el Campus Santiago de la UV.
Por otro lado, Rafael Torres valoró al jurado de la versión 2023 del certamen, expresando que “tenemos un jurado cuya composición, desde la perspectiva de conocimiento, nos augura una selección objetiva, buena y transformadora en materia de artes visuales, como es la presencia de Javiera Moreira, grabadora; Pablo Tomasello, fotógrafo, y Álvaro Miranda, académico y artista visual”.
Finalmente, Torres destacó que “hay premios importantes en dinero; está el Premio de Honor, de tres millones de pesos, que además tiene una exposición individual para el ganador al año siguiente en la misma sala; el Premio Litoral, de dos millones y medio, de adquisición; dos menciones para jóvenes que están en proyección. Y, sobre todo, lo más importante es que este concurso históricamente es una vitrina para los creadores, es una vitrina de lo que está pasando en materia de artes visuales, es un termómetro de la sociedad chilena y es un concurso que da todas las garantías de libertad editorial tanto para el jurado como para los participantes”.
Las bases del XLV Concurso Nacional de Arte Joven están disponibles en www.uv.cl/artejoven.
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