
Ciencia y comunidad iluminaron el Día de la Concientización del Autismo en Valparaíso
La inauguración de una rampa en el Centro Comunal de Autismo de la ciudad puerto simboliza un paso tangible hacia la inclusión, mientras la investigación científica, liderada por voces como la de la doctora Angelina Palacios, desvela nuevas comprensiones del TEA.
En el corazón de Valparaíso, la conmemoración del Día Mundial de la Concientización sobre el Autismo trascendió la mera efeméride para convertirse en un testimonio del poder de la colaboración y el avance del conocimiento. La inauguración de una rampa de acceso universal en el Centro Comunal de Autismo de Valparaíso, coincidiendo con su segundo aniversario, se erigió como una luz de inclusión, que resuena con el anhelo de una sociedad más empática con esta comunidad.
Este evento contó con la asistencia de la alcaldesa de Valparaíso, Camila Nieto; la directora de Salud de la Corporación Municipal, Mónica Riveros; el secretario general de la Corporación Municipal de Valparaíso, Mario del Carpio, y la directora técnica del Centro Comunal de Autismo, Carla Loezar. Les acompañaron el director ejecutivo del Centro Interdisciplinario de Neurociencia de la Universidad de Valparaíso (CINV), Moisés Acevedo; la investigadora del CINV y académica de la Facultad de Odontología UV, doctora Angelina Palacios, y representantes de diversas organizaciones vinculadas al autismo, vecinas y vecinos de la ciudad.
Moisés Acevedo destacó la invitación extendida por la directora técnica del Centro Comunal, en el marco de una colaboración científica en curso con la doctora Angelina Palacios, y también como reconocimiento al compromiso que ha manifestado el CINV con la visibilización y comprensión del Trastorno del Espectro Autista (TEA), en particular a través de iniciativas de divulgación como la Tertulia Porteña “¿Qué sabemos del autismo?”, realizada en noviembre del año pasado.
“La invitación fue para participar en la inauguración de la nueva rampa de acceso universal, un hito simbólico y concreto en la promoción de espacios más inclusivos en nuestra ciudad”, sostuvo Acevedo, y agregó que "fue una experiencia profundamente significativa. La inauguración de la rampa no solo representó un avance concreto en términos de accesibilidad, sino también un gesto potente de inclusión y respeto hacia la diversidad. El ambiente estuvo marcado por la cercanía, el compromiso comunitario y la convicción compartida de seguir construyendo una ciudad más amable y empática. Para nosotros, participar en este tipo de instancias reafirma la importancia de que el quehacer científico y académico se proyecte más allá de los laboratorios y contribuya directamente al bienestar de las personas”.
Asimismo, la doctora Angelina Palacios valoró positivamente la invitación: “Durante la ceremonia se compartieron con la comunidad los logros y desafíos de este proyecto, que continúa creciendo y consolidándose en la región. Fue una experiencia muy enriquecedora. Valoramos esta instancia como espacio de encuentro y colaboración entre profesionales del área clínica, autoridades locales, familias, la comunidad científica y organizaciones locales. Este tipo de actividades permite fortalecer los vínculos entre los distintos actores, y al mismo tiempo, visibilizar las necesidades concretas del territorio, fomentando el trabajo interdisciplinario con un enfoque inclusivo, clave para avanzar hacia una sociedad más justa y consciente de la neurodiversidad”.
Estudios recientes
La investigadora además abordó los avances en la comprensión del Trastorno del Espectro Autista. “Aunque aún falta mucho por comprender, la investigación en neurociencias ha avanzado significativamente en la comprensión de las bases neurobiológicas del TEA. Por ejemplo, se han identificado alteraciones en ciertos circuitos neuronales relacionados con la comunicación social, la regulación emocional y la flexibilidad cognitiva. Además, estudios recientes muestran cómo factores genéticos, epigenéticos y ambientales interactúan durante el desarrollo cerebral temprano, influenciando la aparición de conductas asociadas al espectro autista. Estos avances están permitiendo identificar patrones neurofuncionales que podrían usarse para detectar señales tempranas de autismo. Esto abre la puerta a estrategias de intervención mucho más tempranas y personalizadas, lo cual es clave para mejorar los resultados a largo plazo”, afirmó Angelina Palacios.
La doctora Palacios acotó que un reciente estudio del consorcio GALA (Genomics of Autism in Latin America) representa un hito para la investigación del autismo en América Latina, al analizar por primera vez a gran escala una cohorte latinoamericana con enfoque genético.
“El análisis incluyó a más de mil 600 personas, de las cuales más de 700 presentaban diagnóstico de autismo, provenientes de diversos países como Brasil, Colombia, Costa Rica, México y Perú”, reveló.
Importante hallazgo
En esa línea, Angelina Palacios explicó que “uno de los hallazgos más relevantes fue que 19 de los 35 genes asociados al autismo en esta cohorte también están presentes en estudios previos realizados en personas de ascendencia europea, lo que sugiere que la biología fundamental del Trastorno del Espectro Autista es consistente entre poblaciones, sin una influencia detectable de la ancestría genética. Sin embargo, el valor científico de incluir poblaciones latinoamericanas radica en su diversidad genética única: muchas personas en esta región tienen una mezcla de herencias europea, indígena, africana y asiática, lo que permitió identificar nuevos candidatos genéticos como el gen MARK2, previamente relacionado con retrasos severos del desarrollo, pero no con autismo”.
Además, la investigadora relevó que “estos resultados subrayan la importancia de incorporar mayor diversidad en la investigación genética, ya que podrían mejorar los diagnósticos clínicos y abrir paso a una medicina de precisión más equitativa. No obstante, es necesario interpretar los resultados con cautela, ya que factores como el ambiente o la expresión génica modulada por antecedentes genéticos específicos aún podrían influir, especialmente en las formas de autismo menos severas. Este estudio es un paso importante hacia una comprensión más inclusiva del autismo en el contexto global y latinoamericano”.
Por otra parte, la investigadora señaló que en contextos como la región de Valparaíso, donde existe una necesidad urgente de mejorar el acceso al diagnóstico y tratamiento, integrar estos conocimientos en políticas públicas locales podría marcar una diferencia significativa.
Principales desafíos
Entre los principales desafíos, la doctora Palacios planteó que sigue siendo el diagnóstico oportuno. Enfatizó que “muchas familias deben esperar meses para acceder a una evaluación especializada, lo que retrasa intervenciones clave durante los primeros años de vida. Además, existe una gran desigualdad territorial: las familias en zonas más alejadas o con menos recursos enfrentan mayores barreras para acceder a servicios especializados”.
En relación a la inclusión educativa y social, sostuvo que “aún falta avanzar en la capacitación del personal educativo y de salud, en estrategias de adaptación curricular, y en la promoción de una cultura de respeto por la neurodiversidad. También es urgente fortalecer las redes de apoyo a las familias y promover espacios de participación activa de las personas con TEA en todos los ámbitos de la vida social. Desde la academia y la investigación, nuestro compromiso es seguir generando conocimiento aplicable, que contribuya al diseño de políticas públicas basadas en evidencia, con enfoque territorial y centrado en las personas”.
Nota: Pamela Simonetti