Académica de Ingeniería Oceánica UV dictará cursos de verano sobre modelación regional acoplada
Catalina Aguirre, académica de Ingeniería Civil Oceánica de la UV, dictará —en calidad de profesora colaboradora— dos cursos de verano, desde este viernes 26 de enero hasta el sábado 3 de febrero. El primero en la Universidad de Concepción y luego en la Estación Científica Fundación San Ignacio del Huinay, en el Fiordo de Comau, en la Región de Los Lagos, como parte del Huinay Seasonal School 2024, Fuente de Inspiración para la Ciencia, el Arte y la Cultura.
Al respecto, la académica señala que en el primer curso se busca “acoplar modelos de hidrodinámica con modelos de oleaje, mientras que en el segundo vamos a trabajar modelos regionales e hidrodinámicos del océano, con modelos atmosféricos”.
“En la Universidad de Concepción analizaremos los pronósticos que se realizan con modelación de oleaje, lo que hacemos en el Sistema de Alerta de Marejadas UV, mientras que en el curso siguiente veremos la importancia de utilizar modelación acoplada regional, para luego presentar temas relativos sobre instrucciones a los servidores que llevan a cabo esta modelación conjunta”, añade.
La académica destaca que “en estos cursos estamos desarrollando capital humano avanzado. La comunidad de modeladores del océano en Chile es escasa, somos pocos, nos conocemos, y la idea es hacerla crecer, no damos abasto para todo lo que se requiere hacer en relación al cambio climático”.
“Los modelos regionales son muy importantes, porque hay mucha información a disposición de modelos globales de proyección de cambio climático, pero por el hecho de ser globales tienen una resolución muy gruesa, no permiten evaluar procesos regionales o locales, y a eso nos ayudan los modelos regionales”, explica.
“Estos modelos locales permiten resoluciones más finas, acercarnos en detalle a la costa para evaluar modificaciones proyectadas por Cambio Climático, lo cual contribuye a tener mayor detalle de lo que sucede en nuestro país y tener mejores proyecciones para en lo posible traducirlas en políticas públicas de adaptación o mitigación en la costa chilena”, añade.
Nota: Rodrigo Catalán