Revista científica publica resultados de estudio liderado por la UV sobre daño a personas expuestas a metales pesados presentes en Quintero y Puchuncaví
La Environmental Geochemistry and Health, reconocida revista holandesa de la editorial Springer que difunde investigaciones originales en el campo de la geoquímica ambiental, publicó recientemente el artículo “Daño oxidativo asociado a la exposición a metales pesados presentes en suelos del centro de Chile”, el cual da cuenta de los resultados de un estudio liderado por la directora del Centro Interdisciplinario de Estudios en Salud (CIESAL) y académica de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso, Eva Madrid.
En este trabajo también participaron los investigadores Isabel González (PUCV), ingeniera ambiental que lideró la toma de muestras y los análisis del suelo; Sergio Muñoz (UFRO); Juan Reyes (PUCV); Felipe Martínez (UNAB); Felipe Cardemil (U. de Chile); José Pino (U. de Atacama), y Sebastián San Martín, del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Escuela de Medicina UV.
El artículo publicado aborda la asociación entre la presencia de metales pesados en las comunas de Quintero, Puchuncaví y Concón y su impacto en las personas que residen en esa macrozona. Según explicó la doctora Madrid, sus conclusiones corresponden a un segundo estudio que muestra asociaciones entre la presencia de metales pesados con algún elemento que pueda ser considerado dañino para la salud de las personas en ese territorio.
Al respecto, la líder del equipo a cargo de la ejecución de este trabajo sostuvo que desde hace al menos dos décadas se ha supuesto y comentado que los contaminantes del núcleo energético industrial de Ventanas pueden estar ejerciendo algún tipo de daño en la población que habita los alrededores de ese complejo, pero sólo un artículo previo (del mismo equipo de investigadores, titulado “Concentración de arsénico en la capa superficial del suelo de Chile central se asocia con la metilación aberrante del gen P53 en células sanguíneas humanas: un estudio transversal” y que fue publicado en 2022) ha logrado evidenciar algún tipo de efecto.
Mapeo y toma de muestras
Los investigadores que participaron en el trabajo que dio origen al citado artículo hicieron mapeos de suelos y recogieron más de 600 muestras, logrando establecer mapas de concentración de arsénico, plomo y cobre para las comunas de Quintero, Puchuncaví y Concón. Luego definieron como zonas rojas aquellas que excedían en mucho los límites permitidos de presencia de estos metales, y como zonas verdes aquellas que mantenían metales pesados en niveles dentro de rangos aceptables usando normas internacionales de suelos, ya que Chile carece de normas de concentraciones máximas.
Posteriormente, el estudio consideró la toma de muestras de 280 habitantes permanentes y que hubieran residido más de cinco años en la zona. Esta se dividió en 140 voluntarios de zona roja que fueron comparados con 140 habitantes de zonas verdes, para así establecer si existía daño por radicales libres en los tejidos y componentes celulares de las personas expuestas.
Cabe consignar que los radicales libres son electrones desapareados, que hacen a las moléculas inestables. “Los radicales libres en ocasiones se acumulan en las células y dañan otras moléculas, como el ADN, los lípidos y las proteínas. A pesar de que el cuerpo humano presenta varios mecanismos de defensa contra los radicales libres, este daño (denominado daño oxidativo) es responsable del envejecimiento celular y es posible que aumente el riesgo de cáncer y otras enfermedades”, precisó la doctora Eva Madrid.
Finalmente, la directora del CIESAL y académica de la Escuela de Medicina de la UV detalló que en el proyecto se evaluaron tres variables: daño oxidativo a los lípidos, capacidad antioxidante de las personas y daño al ADN.
“Se pudo determinar que no había relación entre vivir en la zona y presentar daño oxidativo a los lípidos, y la capacidad antioxidante se encontraba conservada entre las personas residentes de zonas contaminadas o zonas verdes. Sin embargo, fue posible establecer —mediante la medición de metabolitos de la guanina, una molécula del ADN— que los habitantes de zonas rojas presentan mucho mayor nivel de daño a nivel de su material genético”, acotó.
Los resultados preliminares de los dos estudios realizados por este equipo de investigadores pertenecientes a diferentes universidades han sido presentados por la doctora Madrid a las comunidades de Puchuncaví y Ventanas, y también en encuentros académicos internacionales que han tenido lugar en la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Sydney (Australia); en la Universidad Autónoma de Barcelona (España), y en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard (Estados Unidos), entre otras.
El articulo “Daño oxidativo asociado a la exposición a metales pesados presentes en suelos del centro de Chile” puede ser leído en el siguiente enlace https://link.springer.com/article/10.1007/s10653-023-01771-w.
Texto: Gonzalo Battocchio