CFT de la UV consigue autonomía y buscará acreditarse en 2013

Patricio Pérez, director del Centro de Formación Técnica, afirmó que también se planea abrir nuevas sedes en Santiago y Valparaíso.

Desde su creación en 2001, el Centro de Formación Técnica de la Universidad de Valparaíso ha buscado fomentar su proyecto educativo y transformarse en una institución seria y cercana a quienes los eligen. Es por esto que durante los últimos años luchó para lograr la autonomía, la que finalmente fue firmada el pasado 16 de enero, lo que permitirá al CFT UValpo generar nuevos planes y programas de manera independiente, crear nuevas sedes y pensar en una pronta acreditación.

Así lo señaló el director Patricio Pérez, quien explicó que entre los beneficios que entrega la autonomía destacan “la flexibilidad e independencia de todo nuestro actuar, pero sobre todo que podremos iniciar nuestro proceso de acreditación, que debiera concretarse a fines de 2013 o principios de 2014”.

Pérez sostuvo que durante los doce años de existencia de la entidad se han preocupado de reforzar el proyecto de programa académico a través de un crecimiento responsable: “La idea es que los planes y programas que el CFT entregue estén relacionados a las áreas que posee la Universidad, para así poder complementar en el aspecto técnico a las carreras. Por lo mismo esperamos que cada día sean más los profesores de la UV quienes impartan clases en nuestra sede”.

Además, consideró que al tener la Universidad sedes en San Felipe y Santiago, no descartan extender el CFT a estas comunas, en donde también deberán responder a las necesidades de la zona, ya sea en el plano agropecuario en el interior del Valle del Aconcagua o ante las necesidades productivas de la capital.

Los estudiantes

Entre las características que posee el CFT de la UV, con única sede en Viña del Mar y ocho carreras técnicas de nivel superior, se cuenta que el 73 por ciento de sus estudiantes son mujeres, con un promedio de edad de 22 años, pertenecientes a los tres primeros quintiles y con egreso reciente de cuarto medio.

Sobre el incremento de estudiantes que han tenido en los últimos años, el director del CFT manifestó que su política es tener una institución que no supere los 800 alumnos, como lo es actualmente, ya que su objetivo es tener “pocas carreras, alta empleabilidad y un promedio de 30 estudiantes por curso. Queremos lograr que el director pueda conocer a todos los estudiantes, que exista un trabajo personal con los coordinadores de carrera y sus estudiantes”.

Uno de los problemas que afecta a los centros de formación técnica en el país es el alto porcentaje de deserción, por factores económicos y laborales, principalmente. En el caso de la sede de Viña del Mar, la deserción marca un porcentaje cercano al 30 por ciento. Pérez señaló que la acreditación ayudará a disminuir esta cifra, ya que los estudiantes podrán acceder a créditos y subvenciones estatales para completar sus estudios, ya que actualmente el CFT no posee ningún sistema de financiamiento de apoyo.