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Malla curricular de Nutrición y Dietética UV optimiza formación de profesionales y marca la diferencia

09 Enero 2013

El nuevo plan de estudios 2013 —innovado por competencias— se orienta a formar profesionales capaces de enfrentar en forma integral uno de los más complejos problemas de salud, como es el exceso de peso y sus efectos colaterales, que actualmente afecta a cerca del 70 por ciento de la población adulta en Chile.

Los últimos datos entregados por la Encuesta Nacional de Salud son poco alentadores: el nivel de obesidad sumado al de sobrepeso en personas adultas, llegaría a casi el 70 por ciento. En el caso de los niños, la cifra es igualmente preocupante y alcanzaría a cerca de un 40 por ciento.

Si a lo anterior agregamos que todas estas personas tienen un mayor riesgo de generar enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión o cáncer, el escenario se pone color de hormiga y el país tendrá que hacerse cargo de un enorme grupo de gente, que necesitará en el corto plazo de un importante apoyo para mejorar su calidad de vida.

Bajo este prisma y considerando que el factor epidemiológico ha cambiado en las últimas décadas de una manera relevante en el ámbito nutricional, transitando de la carencia al exceso, la Facultad de Farmacia de la Universidad de Valparaíso y particularmente su carrea de Nutrición y Dietética (NyD), presentó un innovador plan de estudios 2013, orientado por competencias, cuyo fin es optimizar la formación de los profesionales de esta área.

Así lo explicó la directora del Comité Curricular de NyD, Marcela Alviña Walker, quien destacó que este es el único proyecto de innovación curricular Mecesup en carreras de Nutrición y Dietética en Chile, que está orientado por competencias, y la UV fue la primera en implementarlo.

De acuerdo a los tiempos epidemiológicos

Tal como indicó Marcela Alviña, en nuestro país una parte muy relevante de la población presenta enfermedades crónicas no transmisibles y además obesidad (esta última tomada como enfermedad o como promotora de otras enfermedades relacionadas con la nutrición), por lo tanto el profesional nutricionista en la era actual ha adquirido un alto valor. Sin embargo, los planes de estudio fueron elaborados en un tiempo epidemiológico previo, en el que había otras problemáticas nutricionales y las carencias en nutrición eran más importantes que las enfermedades por exceso, como son ahora. Dado lo anterior, la Universidad de Valparaíso vio necesario hacer un giro intencionado, muy bien hecho y coherente, en el programa de la carrera NyD, con un perfil de egreso profesional que marque la diferencia mediante una característica mucho más concordante con la transición epidemiológica actual.

“Este plan de estudio se diferencia de otras propuestas académicas porque las asignaturas del programa están puestas con un sentido específico. Cada una de ellas tiene como propósito lograr un conjunto de resultados de aprendizaje que tributan al perfil de egreso. Por lo tanto, no hay nada que sobre o que falte. Es un plan de estudios en el que la mayor parte de los aprendizajes serán adquiridos a través de actividades prácticas lo más cercanas a la realidad y donde el aprender a través de la indagación cumple un rol relevante”.

Otro plus de la malla, sostuvo la académica, es que cada asignatura es intencionada hacia el perfil del nutricionista. “Por ejemplo, en vez de estudiar biología el alumno estudiará los principios biológicos de la nutrición; lo mismo ocurre en el campo de la microbiología, donde el alumno se preparará en microbiología en alimentos y salud, y en el caso del área de los alimentos, nuestros estudiantes aprenderán las propiedades nutricionales y saludables de los alimentos. Además, cada asignatura es integradora en sí misma. Así nuestros estudiantes ya no cursarán anatomía y luego fisiología, sino que en esta nueva modalidad aprenderán de manera integrada el funcionamiento de las estructuras anatómicas y de los sistemas del organismo humano”.

Más de 60 programas

La diferenciación es relevante frente a la gran oferta de programas académicos en este campo. Marcela Alviña indicó que nuestro país en el último tiempo ha experimentado una explosión de carreras de nutrición. Diez años atrás en Chile había alrededor de 30 programas de nutrición, y en estos momentos existen más de 60. “En la Quinta Región, la carrera de NyD de la UV fue la primera en abrirse (2001) y la primera también en obtener la acreditación (2010); pero para el 2012 ya existen diez carreras de nutrición sólo en esta zona. Por lo tanto, introducir en los planes de estudios elementos innovadores y diferenciadores es de alta importancia para seguir siendo pioneros en este campo”, afirmó.

Cabe acotar que a nivel nacional, al año 2011 sólo seis carreras de las 68 existentes estaban acreditadas.

El innovador programa incluye además hitos de progreso, que son momentos verticales en la malla, en los cuales se mide el logro de los resultados aunados al cuarto semestre. La forma de evaluar es absolutamente integrada y basada en una simulación de situaciones que deberá resolver como futuro profesional.

“Cuando uno habla de un plan innovado orientado por competencia se trata de una formación mucho más integral para los estudiantes, en que no sólo es importante la entrega de conocimientos, sino que desarrollen actitudes y habilidades necesarias para el ejercicio profesional y también se fomenten los valores, como la ética, el compromiso social, etcétera. Los tres ámbitos —cognitivo, actitudinal y valórico— son indispensables para prevenir, diagnosticar y resolver diversas situaciones y problemas bajo una mirada integradora”.

En el primer hito de progreso se va a medir el logro de todos los resultados de aprendizaje programados hasta el cuarto semestre. Por ejemplo, explicar al paciente el problema o enfermedad que padece y entregar diagnósticos y soluciones, tal cual lo haría si estuviese en una situación real. Este hito será requisito para avanzar al quinto semestre.

Cuatro dominios

El nutricionista egresado de la UV, en cualquier área laboral que se desempeñe, debe cumplir con cuatro dominios: atención en salud, gestión, educación y científico. En este sentido el currículo es generalista, ya que sus egresados estarán preparados para trabajar en todos los campos de acción. No obstante, la carrera ha definido su sello diferenciador en alimentos, siendo su competencia distintiva “utilizar las características de los alimentos, sus propiedades, riesgos y beneficios en salud, como eje central para la promoción de estilos de vida saludables, la prevención y el tratamiento de las enfermedades”. Concordantemente con esta línea, los estudiantes podrán optar a la continuidad de estudios de postgrado, a través del Magíster en Gestión de Servicios de Alimentación y Nutrición.

Además, el programa contempla un plan de seguimiento de procesos y resultados, que en forma permanente irá reevaluando el modelo aplicado.

Marcela Alviña indicó que el nuevo modelo se ha convertido en todo un desafío, porque para echarlo a andar se necesitan personas activas. “Vamos a tener que usar todas las herramientas necesarias para motivar a los estudiantes a que se conviertan en personas activas y no sólo receptores. Yo confío en este modelo, porque los alumnos se entusiasman mucho más con las actividades prácticas que con las teóricas y este plan de estudios basa sus aprendizajes en las actividades prácticas, como laboratorios, salidas a terreno tradicionales como hospitales y consultorios, y otras novedosas como colegios, hogares de adulto mayor, atención al consumidor, industrias de alimentos, etcétera. Uno ve en los actuales programas académicos que cuando se realizan actividades del tipo práctico los aprendizajes son siempre mejores”.