La unidad académica desarrolla los programas de extensión “Paternidad responsable” y “Más cerca de mi hijo”.
La carrera de Educación Parvularia del Campus San Felipe de la Universidad de Valparaíso está desarrollando programas de extensión dirigidos a la comunidad. Entre ellos, destacan los talleres “Paternidad responsable” y “Más cerca de mi hijo”, impartidos en el marco de prácticas profesionales, proyectos educativos y tesis, entre otros formatos.
Respecto del taller “Paternidad responsable”, está a cargo del Centro de Estudiantes de Educación Parvularia. La actividad está dirigida a la comunidad de la población La Escuadra, en el marco de un proyecto de prevención selectiva al que se sumaron estudiantes de pregrado de la carrera de Obstetricia y Puericultura del mismo Campus. Este taller abordó temáticas tales como afectividad, paternidad responsable y planificación familiar, entre otras.
Participaron en este taller las alumnas Érika Cantillano, María Consuelo Palma, Paulina Tapia, Viviana Machuca, Jenifers Pozo y Leslie Díaz, de la carrera de Educación Parvularia, y Aliosha Bravo, María Cecilia Zura, Zarela Segovia y Natalia Martínez, de la cátedra Salud Comunitaria de Obstetricia y Puericultura.
“Más cerca de mi hijo”
Por su parte, el proyecto “Más cerca de mi hijo” se acaba de iniciar en la cárcel de San Felipe, realizado por estudiantes de la carrera de Educación Parvularia. El objetivo de esta actividad es potenciar el vínculo afectivo entre los padres internos en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Felipe y sus hijos menores de seis años, por medio de una estrategia pedagógica.
De esta forma, las estudiantes pretenden potenciar el vínculo afectivo entre los padres y sus hijos o hijas, además de trabajar temáticas parentales con los internos y potenciar las instancias de reencuentro entre los padres y los hijos.
Según explican las alumnas, la idea es trabajar con un grupo de quince internos, y cuando el taller sea reconocido como un beneficio se pueda ampliar la cobertura: “Esperamos potenciar en el párvulo un modelo de ente paternal positivo y no negativo como hasta ahora se hace”, acotan.
En esta actividad, que lleva ya un año y medio de desarrollo, colaboró con las estudiantes el programa Previene, de Conace. Este proyecto, sin fondos, nació como una iniciativa particular de las alumnas.
En la puesta en práctica del proyecto, las estudiantes trabajan una vez por semana con los internos, en talleres de dos horas aproximadamente, y una vez al mes desarrollan encuentros familiares en que participa el interno, el niño y el adulto significativo que lo acompañe. Las alumnas también han trabajado la afectividad entre padres e hijos en fechas tan significativas como la Navidad.
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