Convivencia, resolución de conflictos, políticas educativas y medición de los programas ministeriales son los ejes centrales de análisis.
La falta de una educación integral, la mejora de los estándares de calidad de los profesores, la falta de apoyo del gobierno y las municipalidades a las escuelas y el desarrollo de una educación cerrada que no tiene contacto con la comunidad, son elementos que determinan que los niños no reciban una buena educación. En este sentido, la formación de los profesores es importante para que no sólo desarrollen clases en el aula, sino también en el contexto social en que se desenvuelve el colegio y la comunidad. Fuera de ser un instructor que forma a los niños, fundamental es que el profesor trabaje con la comunidad.
Esta práctica es conocida en Europa y Estados Unidos, donde fuera de tener el apoyo de los municipios, los buenos resultados de los trabajos con el entorno dependen mucho de la voluntad de los profesores para salir del aula y trabajar con niños arreglando parques, pintando casas o conociendo el comercio que se desarrolla en sus barrios.
El académico Francisco Imbernón, de la Universidad de Barcelona, habló sobre esta experiencia en las Jornadas Internacionales de Psicología Educacional que se desarrollan en la Universidad de Valparaíso hasta este viernes, en el auditorio de la Escuela de Derecho.
“Es importante que los niños reciban una educación paralela fuera de las aulas; es decir, si un chico que tiene condiciones de riesgo social, de caer en drogadicción o caer en la tentativa de robos, que se forme con tareas que desarrolla su comunidad; para eso es necesario que el maestro conozca a la comunidad donde vive el niño para así evitar el ausentismo del escolar”, explica Imbernón.
Agregó que “en la disciplina de enseñar, resulta fundamental que los profesores sean capaces de conocer no sólo una teoría o repetir conocimientos, sino también trabajar en la propia comunidad”. El académico español manifestó que es importante tener actitud y voluntad. Cuando ocurre eso, la escuela puede lograr fácilmente el apoyo de la municipalidad, institución fundamental para desarrollar un trabajo con la comunidad. “La escuela se convierte en un centro de aprendizaje y para eso es importante que los padres, que la sociedad que envuelve la escuela participe también en el debate de la educación de sus hijos”, afirmó.
Más de 400 psicólogos y educadores del país y del extranjero participan hasta este viernes 6 en las IX Jornadas Internacionales de Psicología Educacional, organizadas por la Escuela de Psicología de la UV.
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