Fueron las propias alumnas quienes organizaron su ceremonia.
Felices y emocionadas se mostraron 35 alumnas de la carrera de Educación Parvularia de la UV al recibir en forma simbólica la investidura que las acredita para ejercer su práctica profesional, la que inician este mes.
Acompañadas de sus familiares y profesoras, quienes siguieron atentamente la ceremonia desarrollada en el auditorio Pedro Uribe Concha de Faculta de Medicina, las futuras parvularias, que llevaban su tradicional uniforme verde, recibieron su piocha como proceso simbólico de iniciación de sus prácticas profesionales.
Un año de trabajo tendrán que cumplir las universitarias en jardines infantiles de la región, en centros de integración y, por primera vez, en centros de atención de salud primaria en el marco del programa Chile Crece Contigo.
“Esta es una instancia para dar conocer lo que hemos logrado hasta el momento en lo que nos distinguimos con respecto a otras carreras y todo lo que ello involucra en la formación en neurociencia, salud y alimentación. La ceremonia es muy especial, porque te pones el delantal, pero más que eso, es lo que llevamos por dentro que nos inicia en nuestro proceso de práctica profesional”, señaló la alumna Jacqueline Valenzuela.
La ceremonia fue organizada por las propias alumnas, evento que se desarrolla por segunda oportunidad en la agenda de actividades de la carrera de Educación Parvularia de la UV.
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