Su obra “Naturaleza muerta” obtuvo el premio al Mejor Cortometraje Experimental Nacional.
Amanda Mora, alumna en proceso de titulación de la carrera de Cine de la Facultad de Arquitectura de la UV, tuvo una destacada participación en el Festival de Arquitectura de Santiago, Arqfilmfest, donde su obra “Naturaleza muerta” obtuvo el premio al Mejor Cortometraje Experimental Nacional.
Amanda explica que “la arquitectura y el cine están muy vinculados entre sí. Las dos áreas se basan en los espacios en que vivimos como seres humanos. Arquitectura no es sólo construir edificios, es entregar un espacio habitable en concordancia a las personas que habitan en un sector específico, respetando la naturaleza física del lugar, al igual que la de las personas. El cine rescata la espacialidad, ya sea literal o metafóricamente hablando”.
La alumna de Cine UV agrega que “si podemos hacer una película que intenta describir y transmitir la soledad de un individuo dentro de una sociedad acelerada y violenta, estamos hablando de una crisis existencial de un individuo que no se siente cómodo en una gran ciudad y quizás prefiera vivir en un lugar más tranquilo. El espacio siempre ha afectado a las personas”.
Naturaleza muerta
Tal como señala la estudiante, la obra fue un proyecto documental, desarrollado en la asignatura de Taller de tercer año de la carrera. “Comenzó como la imagen de una flor o planta saliendo del cemento, lo que representa la naturaleza intentando renacer en el espacio que le había privado el ser humano. Formamos parte de esta naturaleza, pero no tenemos mayor poder sobre ella, aunque siempre hemos abusado de nuestro poder. La idea base del proyecto era generar conciencia sobre esto”, señala la alumna tesista.
Amanda agrega que “el cortometraje se presenta narrativamente como una guerra entre ser humano y naturaleza, partiendo de la base de que un espacio partió siendo natural y luego fuimos destruyendo y construyendo sobre éste para nuestros beneficios. Pero aquí no termina la historia. La naturaleza se hace presente violentamente ante nuestros ojos con desastres naturales como terremotos, erupciones volcánicas, huracanes, etcétera. Es recién en este momento en que nos damos cuenta de que no tenemos tanto poder como creíamos. Pero esta conciencia dura poco, pues vamos cometiendo los mismos errores y ninguno de los dos bandos va ceder, convirtiéndose en una guerra interminable”.
Desde el punto de vista audiovisual, según Amanda, el corto busca “presentar la naturaleza y el ser humano como entes opuestos, basándose en el concepto antroposófico de la inexistencia de la línea recta en la naturaleza. Por ello asociamos la naturaleza a conceptos como la curva y el tiempo pausado, y al ser humano a la línea recta y al tiempo acelerado”.
En cuanto a la técnica utilizada, Amanda explica que el trabajo “es una mezcla de formatos audiovisuales, con un diseño sonoro que acompaña, sin diálogos, la historia que cuentan las imágenes. Esta idea se llevó a cabo gracias a un gran equipo que me apoyó desde los inicios del proyecto. Fuimos desarrollando el documental y cada uno fue aportando desde el área en que mejor se desarrollaba: fotografía, montaje, sonido y producción. Creo que fue una de las mejores experiencias de grupo de trabajo que tengo de la carrera”.
Reconocimiento
Respecto del significado que tiene este premio, Amanda manifiesta que “todos los reconocimientos son importantes. Quiere decir que la parte comunicacional de la obra está funcionando, que el concepto se comprende y llega al espectador. Valoro mucho las opiniones o comentarios que la gente hace a mis trabajos, sobre todo las personas que no provienen del área audiovisual. Me ha permitido descubrir cosas que no había pensado antes, que hacen crecer y reafirmar mis propios pensamientos”.
Sobre los nuevos proyectos en que se encuentra trabajando, la alumna destaca su vinculación con el área de la animación. “Postulé con un proyecto de televisión a un fondo concursable de Corfo, un programa infantil de animación que intenta rescatar la identidad cultural nacional, a través de distintas mitologías. Creo que un país como Chile posee una amplia gama de diversidad cultural, y como alguien proveniente del área del cine, siento que deberíamos rescatarlas y enseñarlas a las nuevas generaciones de niños y niñas”.
Finalmente, en cuanto a sus planes profesionales a futuro, Amanda agrega que de forma paralela al cine ha estado muy vinculada al dibujo. “Me interesa mucho la ilustración y el mundo referente a los cuentos ilustrados, las novelas gráficas. A pesar de que no quise estudiar diseño gráfico, terminé por involucrarme en ésta área más de lo que pensé y por lo demás me gusta mucho. Mi idea es estudiar más adelante, en el extranjero, algo con ilustración”.
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