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UV de duelo por fallecimiento de profesor emérito Tomás Goya Escobar

08 Octubre 2012

Hondo pesar entre académicos, funcionarios y estudiantes por la partida de quien fuera uno de los fundadores del Departamento de Anatomía de la Escuela de Medicina.

De duelo se encuentra el Departamento de Anatomía de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso, tras el fallecimiento de quien fuera uno de sus fundadores, destacado académico y profesor emérito: el doctor Tomás Goya Escobar.

Calificado por sus colegas como una persona ejemplar, el profesor Goya inició su carrera docente en 1959 como ayudante alumno de la Cátedra de Anatomía de la carrera de Odontología de la Universidad de Chile, sede Valparaíso.

En 1963, luego de titularse como el mejor alumno de su promoción, fue contratado como profesor ayudante. En 1981, el doctor Goya asumió como profesor auxiliar y pasó a formar la planta docente de la recién creada Universidad de Valparaíso, alcanzando posteriormente la jerarquía de profesor adjunto. Posteriormente llegó a ser jefe de cátedra de Neuroanatomía por largos años.

Asimismo, ejerció docencia de pre y postgrado en las carreras de Odontología, Enfermería, Obstetricia, Química y Farmacia, Fonoaudiología, Kinesiología, Educación Básica, Biología y Educación Física.

Sus más cercanos, sin embargo, confiesan que su área predilecta siempre fue su querido Departamento de Anatomía, donde enseñó desde la creación de la carrera de Medicina, en 1961, y en San Felipe desde el 2005.

En el año 2010 se acogió a retiro, tras 51 años de carrera académica y funcionaria. En 2011 fue nombrado profesor emérito de la Facultad de Medicina.

Hombre excepcional

A través de un mensaje abierto a la comunidad universitaria, el profesor Jaime Peralta Guzmán —quien trabajó y compartió durante largos años junto al doctor Goya— lo calificó de hombre de excepción y lamentó profundamente su partida. “En agosto le dimos su nombre al Laboratorio del Departamento. Lo más destacable es que a pesar de estar jubilado, siguió asistiendo a sus labores como docente, colaborando en las clases, evaluaciones, laboratorios y seminarios como uno más del equipo. Ya enfermo, y liberado de sus autoimpuestas obligaciones, con grandes dificultades, nos acompañó y guió hasta hace una semana, en que ya no pudo movilizarse”, aseveró.

También lo recordaron con gran cariño otros dos de sus colaboradores en el Departamento de Anatomía: el técnico Jorge Rosas y la secretaria Carmen Carrasco. Ambos revelaron que jamás faltó a actividad académica alguna. Para él su compromiso con sus “cabezones e ignorantes”, como cariñosamente llamaba a sus estudiantes, siempre fue sagrado.

Los funerales del doctor y profesor Tomás Goya, quien tenía 72 años, se efectuarán en forma privada, después de una misa por el descanso de su alma que será oficiada este martes 9 de octubre, a las 11:00 horas, en la Iglesia de los Padres Carmelitas de Viña del Mar.