Programa Ciencia Al Tiro inauguró duchas solares termales en Escuela Pacífico de Playa Ancha
Proyecto fue desarrollado por el Centro de Neurociencia de la Universidad de Valparaíso, para beneficiar a los niños que tendrán duchas calientes todo el año, y que además aprendieron sobre la energía sustentable. Es la primera escuela pública de la ciudad en contar con este sistema.
Un costo de cinco millones 600 mil pesos tuvo la implementación del sistema de duchas solares termales en la Escuela Básica Pacífico, en Playa Ancha. El proyecto, que fue inaugurado este martes, fue desarrollado por el programa Ciencia Al Tiro, del Centro Interdisciplinario de Neurociencia de la Universidad de Valparaíso, CINV.
La ceremonia inaugural contó con la presencia de las autoridades del colegio y del Centro de Neurociencia, de sus alumnos de doctorado, de los encargados del programa Ciencia Al Tiro, de representantes del Concejo y la Corporación Municipal, estudiantes y padres y apoderados de los cerca de 200 alumnos del establecimiento.
La directora de la Escuela Pacífico, Patricia Arancibia, destacó que “yo creo que Dios nos ama. Hace treinta años que estoy en este establecimiento y he logrado muchas cosas: tengo un lindo profesorado, una comunidad buena. Y con las amistades uno a veces consigue cosas, que es este caso. Para nosotros como escuela es un orgullo tener este proyecto. Somos la única escuela pública que tiene estos paneles, que son para los niños, para que aprendan de la energía, de la energía sustentable, de nuestro ambiente que está tan contaminado”.
La directora agradeció especialmente el trabajo de Kathleen Whitlock, la académica a cargo del programa Ciencia Al Tiro y quien escogió el colegio para desarrollar este trabajo. En este sentido, la profesora Whitlock indicó que escogió al establecimiento por dos factores: sus resultados en la prueba Simce, que es uno de los pocos en Playa Ancha calificado con amarillo, y las características de su directora, que ha demostrado su interés por motivar a los estudiantes en los temas ambientales.
Ciencia Al Tiro
Kathleen Whitlock inició el programa Ciencia Al Tiro el año 2008, con talleres de ciencia para niños de séptimo año básico de la Escuela República Árabe Siria, también de Playa Ancha. Allí se elaboró un proyecto de eficiencia energética, implementando una sala para ciencias. Dicho proyecto ganó el premio nacional Chile Verde.
Ahora, la profesora Whitlock trabaja con la Escuela Pacífico, para lo que cuenta con el respaldo del Centro Interdisciplinario de Neurociencia y de los alumnos de doctorado de esa unidad. Su objetivo es volver a ganar el premio Chile Verde, como también apoyar a los niños en su acercamiento a la ciencia. “Esta tecnología, la energía sustentable, es el futuro, y hay que enseñarla a los niños. Si queremos mejorar el país, tenemos que partir por la gente joven”, afirmó.
Kathe Whitlock añadió que “hay mucho para trabajar en una escuela pública, y esta escuela tenía antecedentes de medio ambiente, así que no fue trabajo explicarles el valor del proyecto. La directora entendió bien la idea de cómo puede usar energía sustentable para enseñar ciencia; también aquí la profesora de ciencia es muy buena y tienen profesores de medio ambiente, que ayudan mucho. Hay un dicho en inglés, ‘don’t judge a book by his cover’, que significa que no hay que mirar un libro por su cubierta y hacer un juicio de lo que está dentro: esta escuela pobre tiene muchos problemas sociales, a veces llegan en la mañana los carabineros, pero la escuela tiene muy buena onda, por eso es fácil implementar este proyecto aquí”.
El proyecto de duchas solares termales consiste en una serie de tubos instalados en el techo del establecimiento, cuyas características permiten calentar el agua en su interior a partir de la energía solar. En días nublados, el agua, que entra al colegio a una temperatura de 17 grados, alcanza los 75 grados en los tubos. En días de sol, la temperatura del agua puede llegar a los 95 centígrados. De esta forma, las duchas disponen de agua caliente en forma constante, lo que antes no sucedía, ya que la Municipalidad no entrega a la escuela dinero para gas destinado a duchas, sino sólo a las cocinas. Si se valora el gas que se utilizaría en calentar el agua, en un año la suma alcanzaría a tres millones de pesos; de esta forma, en menos de dos años se recuperaría el total de la inversión.