Estudiantes de Enfermería, Fonoaudiología y Psicología realizaron un operativo de prevención y educación.
Cerca de 57 adultos mayores que asisten al Centro de Salud Comunitario Padre Carlos Hallet, del cerro San Roque, fueron atendidos por alumnos de Enfermería, fonoaudiología y Psicología de la Universidad de Valparaíso, quienes desarrollaron un operativo orientado hacia la promoción y prevención en salud.
Los jóvenes realizaron un puerta a puerta en el sector, actividad que tuvo buenos resultados, ya que hasta el centro comunitario llegaron numerosos adultos para recibir atención en estilos de vida saludable y ejercicios, prevención de diabetes e hipertensión.
“Estamos aquí apoyando a la comunidad, especialmente a los adultos mayores. La idea es que los alumnos manejen información importante para tener una buena calidad de vida, a pesar de sus años. Lo importante es mantener a los adultos mayores activos, que participen en la sociedad, y para eso es fundamental la educación”, señaló Carolina Ruiz-Tagle, académica de la Escuela de Enfermería de la UV.
La docente señaló que los alumnos realizaron un labor educativa hacia la comunidad, a través de operativos nutricionales, control de presión, medición de peso y talla, todo en el centro de atención de San Roque.
La alumna Maura Zuñiga confirmó que esta es una buena instancia tanto para los estudiantes como para la comunidad, ya que se trata de un trabajo de atención primaria. “En general, la gente espera sentirse mal para asistir a un centro, ya sea consultorio u hospital; por eso, acá nosotros les entregamos todas las herramientas previas a la enfermedad, todo lo que es cuidado preventivo por ejemplo en alimentación saludable, para evitar las enfermedades crónicas”, explicó la estudiante.
Por su parte, su compañero Cristian Acosta resaltó la importancia de trabajar con la comunidad, ya que entrega un valor agregado a lo que hacen: “Hemos apoyado a la gente que viene a ver lo que es diabetes o hipertensión, para fomentar estilos de vida saludable”, señaló.
El operativo finalizó con un taller de musicoterapia, en el cual los adultos escucharon música mística y variados sonidos de instrumentos que indujeron en ellos estados de relajación.
Relacionados
