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Javier Frelijj, la joven promesa del balonmano UV

12 Julio 2011

Estudiante de Tecnología Médica representará a Chile en Grecia, en el XVIII Campeonato Mundial de Balonmano Masculino Junior.

Javier Frelijj, alumno de Tecnología Médica de la Universidad de Valparaíso, es el seleccionado chileno de Balonmano que representará a nuestro país, junto a otros 16 jugadores, en el XVIII Campeonato Mundial de Balonmano Masculino Junior, que se realizará en Grecia del 17 al 30 de julio próximos.

Javier, quien ingresó hace tres años a la carrera de Fonoaudiología de la UV, y que por cuestiones vocacionales se retiró el primer año, ingresó el 2010 a Tecnología Médica a través del Ingreso Especial Deportistas Destacados.

El joven de 20 años, oriundo de Valparaíso, practica este deporte desde los seis años, jugando en importantes clubes deportivos como el Santiago Wanderers y el Club Luterano, del cual forma parte actualmente.

—¿Cómo te estás preparando para este importante campeonato?

—Me llamaron a participar en este torneo en abril del año pasado. Inicié el proceso de preparación, entrenándome para el Panamericano Adulto que se realizó en Chile, pero por motivos de estudios me retiré. Reanudé la preparación el segundo semestre del año 2010; sin embargo, una vez más debí abandonar la práctica del handball a nivel nacional, pero continué participando a nivel universitario. En enero de este año comencé nuevamente a entrenarme para el Campeonato Mundial, y estuve hasta febrero preparándome de lunes a sábado en el Centro de Entrenamiento Olímpico. Fue bastante desgastante, porque volvía a mi casa los domingos para partir nuevamente a Santiago los lunes por la mañana. Era muy intensivo el entrenamiento.

—¿Cómo haces para dividir tu tiempo entre ambas actividades?

—Es difícil, a pesar de que la Universidad me otorga todas las facilidades para hacer ambas cosas. Debo entrenar mucho. Todos los fines de semana debo viajar a Santiago, además de prepararme un par de veces acá en Valparaíso. Ha sido complicado, especialmente cuando tengo clases los sábados, y a pesar de que la carrera me permite faltar a esas cátedras, se me hace muy difícil no estar presente, pues en mi caso donde más aprendo es en el aula.

—¿Qué te parece competir contra países profesionalmente superiores en este deporte?

—Vamos a competir con grandes potencias y, sin duda, ellos están mejor preparados que nosotros. Son países donde los deportistas viven del deporte, o donde a los jóvenes se les brindan todas las facilidades para entrenar y estudiar. Claramente ellos son profesionales en el balonmano, a diferencia nuestra que competimos a nivel amateur. Entonces sabemos a lo que vamos: vamos con la mentalidad de sumar experiencias para las futuras generaciones, para lograr que Chile pueda frecuentemente a competir a nivel internacional en handbaall.

—¿Cuáles son tus proyecciones a futuro?

—Es complicado pensar en dedicarme de lleno al balonmano. Chile es un país subdesarrollado en esta materia, que no te permite vivir del deporte. Entonces yo no me dedicaría cien por ciento a él. Me interesa especialmente desarrollarme a nivel profesional. (…) Acá en Chile hay problemas de Federación, existe muy poca ayuda económica para los deportistas, lo que implica que debemos financiar viajes, alimentación y transporte nosotros mismos. Todos estos problemas no te permiten proyectarte a futuro como deportista. Imagínate que Brasil y Argentina compiten a nivel europeo, en cambio nosotros recién jugamos con equipos de primera división en Buenos Aires. A pesar de todo, mi idea es convertirme en un profesional de la Tecnología Médica, pero siempre con el deporte a cuestas.