UV dictó curso para capacitar a investigadores en el manejo ético de los animales de experimentación
El objetivo es minimizar lo más posible el sufrimiento de los animales y tratarlos con respeto.
“Existe una gran preocupación en todo el mundo por el respeto a los animales de experimentación, y nosotros como Universidad no queremos estar ajenos a eso. Estamos capacitando, sobre todo a nuestros estudiantes de pre y postgrado, para que tengan ese respeto y esa responsabilidad por un uso humanitario o un uso ético de los animales de experimentación. Eso no solamente implica el que el animal no sufra, sino que implica que para eso la persona tiene que saber de qué forma manejar al animal y cuáles son las técnicas más apropiadas para evitar o reducir ese sufrimiento al máximo”.
Así se expresa la profesora María Fernanda Cavieres, del Laboratorio de Toxicología de la Facultad de Farmacia, sobre el curso teórico práctico “Manejo y uso de roedores para experimentación”, impartido por primera vez por la Dirección de Investigación de la Universidad de Valparaíso. La iniciativa responde a la necesidad de que los profesionales estén adecuadamente capacitados para el correcto manejo de los animales.
Al respecto, señala la académica que “en todas partes del mundo se utilizan modelos biológicos, lo que hay que regular y armonizar, tarea que asumió la Dirección de Investigación, entre otras cosas, regularizando el trabajo de los comités de bioética. Como parte de los requisitos que pueda tener un comité de bioética para aprobar un proyecto que utiliza animales de experimentación, las personas deben ser capacitadas, estar acreditadas o tener experiencia. Cuando son estudiantes de pregrado es difícil que eso se cumpla, así que se diseñó este curso, que está en su primera versión, tendrá una segunda versión en agosto y se instalará como programa”.
Consultada respecto de qué significa exactamente estar capacitado para trabajar con animales de experimentación, María Fernanda Cavieres explica: “A quien se le permita trabajar, tiene que respetar al animal de experimentación. Como a veces no entendemos muy bien lo que es el respeto, trabajamos con ciertas normas de laboratorio, las que implican todo un manejo de forma apropiada. Hay formas de manejar al animal, tomarlo bien, recolectar correctamente una muestra de sangre. Todo apunta a minimizar —porque a veces no se va a poder evitar—, a minimizar lo más que se pueda el sufrimiento del animal. Eso también tiene que ver con el uso de anestesia, con el uso de analgésicos, y con algunas normas básicas de trabajo con el animal de experimentación: asegurarse de que todos los días tienen comida, todos los días tienen agua, que sus jaulas están limpias, que estén en un ambiente donde no haya ruido, entre otras cosas”.
Minimizar el sufrimiento
La veterinaria Claudia Delgado está a cargo de los bioterios de la Universidad de Valparaíso, el lugar donde se mantienen los animales para experimentación y donde hay producción de animales.
“Hay una cepa de ratas, una cepa de ratones, y se mantienen otros animales de algunos investigadores en particular. Estos animales son entregados a los investigadores, dependiendo de lo que ellos necesitan”, explica la profesional, a quien además en ocasiones corresponde apoyar el trabajo de los investigadores, por ejemplo, con las extracciones de sangre o la administración de fluidos para desarrollar algún protocolo.
Respecto de cómo enfrenta el tema de la empatía hacia los animales del bioterio, sabiendo que van a ser utilizados en experimentación, Claudia Delgado señala: “Mi responsabilidad como veterinario es evitar al máximo ese sufrimiento y asegurar el bienestar de los animales, si bien es inevitable que exista: ese es el problema, que es inevitable que exista. Entonces, mi rol de veterinario es que este trabajo sea desarrollado de la mejor manera posible”.
Añade: “Es complicado el hecho de ser veterinario, porque también uno se cuestiona que uno trabaja en pro de la salud del animal, y salud se entiende como que se mantenga la vida del animal, y aquí es al contrario. Pero por eso hay que asegurar que durante el tiempo que el animal de experimentación, que está destinado para ese fin, viva o sea utilizado, todas las condiciones que estén presentes durante la producción o durante la experimentación, sean las mejores y aseguren el bienestar de los animales”.
Los comités de bioética son los encargados de autorizar el trabajo de investigación con animales. Su deber es aprobar a quienes están capacitados éticamente para hacerlo, es decir, a quienes tengan conciencia de que al animal de experimentación se le debe tratar con respeto.