Se trata de Alfa III que será ejecutado con fondos de la Comunidad Europea, por un monto superior al millón de euros.
Un importante proyecto relacionado con las metodologías biofarmacéuticas, que redundará en un gran beneficio para la población por cuanto implicará medicamentos de mejor calidad, más eficaces y seguros, se adjudicó la Universidad de Valparaíso, a través de la Facultad de Farmacia. Se trata del proyecto Alfa III “Red para el desarrollo de metodologías biofarmacéuticas racionales que incrementen la competencia y el impacto social de las Industrias Farmacéuticas Locales (Red Biofarma)”, financiado por la Comunidad Europea y cuyo monto supera el millón de euros.
La Red Biofarma está integrada por universidades europeas y latinoamericanas: Universidad Miguel Hernández y Universidad de Valencia (España), Universidad Central de Las Villas (Cuba), Universidad Nacional de Córdoba (Argentina), Instituto de Enzimología de la Academia de Ciencias de Hungría y Universidad de Valparaíso, a través del Área de Biofarmacia y Tecnología Farmacéutica del Departamento de Ciencias Farmacéuticas de la Facultad de Farmacia.
El proyecto adjudicado contribuirá al desarrollo de políticas sanitarias que impacten en la producción de medicamentos accesibles y de calidad, mediante la implementación de metodologías biofarmacéuticas optimizadas y validadas para la obtención y el desarrollo de fármacos más eficaces y seguros, promoviendo a su vez una formación de avanzada tanto académica como científico técnica en los profesionales farmacéuticos latinoamericanos.
“Los proyectos Alfa III son importantes porque abarcan temas que permiten el desarrollo en algunas áreas en la región latinoamericana. Este proyecto busca capacitar a la industria farmacéutica para que pueda avanzar en el cumplimiento de las normas sanitarias en la bioequivalencia o intercambio de medicamentos, para que la población tenga mayor acceso a estos remedios”, señala la coordinadora del proyecto en Chile, Virginia Sánchez, académica de la Facultad de Farmacia.
Según explica la investigadora, el objetivo del proyecto es avanzar de forma más rápida en el cumplimiento de las normas de las industrias en farmacia. “En Chile tenemos una norma en ejecución, que significa que la industria farmacéutica tiene que hacer algunas certificaciones de equivalencia terapéutica de sus medicamentos. Es decir, tiene que hacer estudios para avalar que son seguros y eficaces cuando se administra la normativa para aprobar que son equivalentes a los de marca”, aclara Virgina Sánchez.
Muchas veces se pide a las industrias que entreguen esta información a través de sus laboratorios pero no existen los equipamientos necesarios para la ejecución de las normas para que la industria adquiera los conocimientos y que su personal se capacite.
El proyecto es único en la región de Valparaíso y el país. En virtud de él, la UV podrá adquirir nuevos equipamientos para medir la soludibilidad de los medicamentos, logrando así la institución obtener el segundo equipamiento en importancia después del Instituto de Salud Pública.
Si bien las normas existen, el proyecto permitirá desarrollar un avance más riguroso a cargo de una masa crítica especializada en los estudios para hacer cumplir las normas.
Impacto regional
El proyecto tiene un plazo de tres años para su ejecución, considerando metas anuales. El monto del financiamiento supera el millón de Euros, suma que contempla la adquisición de equipamientos con tecnología de punta avaluados en cien millones de pesos.
La Universidad de Valparaíso será la encargada de desarrollar los estudios de permeabilidad y análisis en la disolución de los medicamentos. En Argentina se desarrollarán los estudios in vitro, Cuba tendrá la responsabilidad de elaborar los nuevos sistemas de software tecnológico y en Brasil se desarrollarán los estudios de prueba en humanos.
“Todos en conjunto vamos a abordar el desarrollo de medicamentos eficaces y seguros por distintos aspectos, implementando así metodologías biofarmacéuticas optimizadas y validadas para la obtención de fármacos eficaces”, indica Virginia Sánchez.
Agrega que “la investigación abre un espacio para apoyar y capacitar a los profesionales del área de la salud que desarrollan trabajos en laboratorios de equivalencia terapéutica, y es posible que el número de profesionales en capacitación aumente, porque Chile está bajo en relación a la investigación de esta área”.
Las investigaciones que produzca la UV junto a las otras instituciones asociadas al proyecto, permitirán realizar investigaciones en pregrado y postgrado, publicaciones en revistas científicas de alto impacto, ponencias en congresos internacionales y la realización de talleres junto a Argentina, Cuba y Brasil.
Las principales investigaciones se harán en el Laboratorio de Tecnología Farmacéutica de la Facultad de Farmacia de la UV.
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