Las actividades se prolongaron del miércoles al viernes, y consideraron talleres, una intervención pública y muestras, entre otras.
Un nutrido programa cultural en homenaje al Día Nacional del Teatro protagonizaron los estudiantes de la carrera de Actuación Teatral de la Universidad de Valparaíso, con el objetivo de “recuperar los espacios naturales de la actividad teatral”, según destaca el actor Andrés García, profesor de la unidad.
García subrayó que la participación de la carrera se dio en coordinación con el Consejo Regional de la Cultura y las Artes y el Sindicato de Actores, lo que permitió desarrollar un programa que aportó “a recuperar el valor histórico que dio origen a la unidad académica de la UV”.
La celebración del Día Nacional del Teatro fue instaurada el año 2006 en honor al desaparecido actor, director y dramaturgo Andrés Pérez Araya, creador del Gran Circo Teatro y de la adaptación de la popular obra “La Negra Ester”.
El programa que preparó el Centro de Estudiantes de la Escuela de Actuación Teatral de la UV y que se desarrolló el miércoles 12 y viernes 14 del presente, comprendió Talleres de Movimiento y Maquillaje, una intervención teatral en el BancoEstado de calle Prat y muestras a cargo de estudiantes de teatro de las universidades de Playa Ancha, de Chile y UV.
Escuela de espectadores
Una de las actividades destacadas del programa fue el foro Escuela de Espectadores, realizado en la sede de la carrera, en avenida Brasil, y que contó con las intervenciones de Javier Ibacache, periodista y crítico teatral; María Soledad Lagos, dramaturga; Luis Barrales, dramaturgo, director y reciente ganador del Premio Altazor, y Andrés Hernández, director de la compañía Los Cuatro Notables.
Según Javier Ibacache, Escuela de Espectadores “es un nombre que se usa fuera de Chile desde hace mucho tiempo para hablar de la formación de audiencias, de públicos, de diálogos, y nace para hacer de puente entre la obra y el espectador, porque el creador asume muchas veces un espectador implícito y el público real a veces no corresponde a ese espectador implícito”, asegura el crítico teatral.
Agrega que la óptica no es intervenir ni dirigir una lectura ni una mirada, sino más bien facilitar herramientas, miradas y contenidos: “Fomentar el diálogo, y a partir de esta experiencia que ya tiene cuatro años instalada en la Región Metropolitana, generar alguna audiencia. Ahora estamos en extensión hacia regiones del país y estamos lentamente generando alianzas con distintas instituciones y festivales, porque en la actualidad no hay espacio para pensar el teatro en los medios de comunicación. Por eso esta realidad emerge como un espacio relevante para los creadores, ya que la creación teatral se completa con el espectador”.
Por su parte, Soledad Lagos indica que la Escuela de Espectadores se ha instalado en la escena local de la Región Metropolitana como un referente. “En esta forma concreta de dialogar con el público, hemos realizado noventa encuentros, y por ellos han pasado más de cien creadores que se han sentado a hablar de su oficio. Ha estado presente la dramaturgia nacional y los emergentes, abarcando todos los géneros, porque el espectro es amplio. Estamos a la expectativa de lo que está ocurriendo y miramos lo que hay”.
La dramaturga añade que “dejamos registros audiovisuales y escritos y ya hemos realizado tres publicaciones que se reparten en forma gratuita a los estudiantes de actuación teatral y al público en general”, destacando que son materiales atípicos y los estudiantes así lo estiman dentro de la manera en la cual se aborda la confrontación con lo que es la creación.
Finalmente, Luis Barrales se refiere a la Escuela de Espectadores como una instancia positiva que ha demostrado su objetivo de crear audiencias críticas. “Es donde se discute el objeto teatral más allá de la experiencia escénica que se aborda desde la creación, que es el análisis propio del espectador, y eso me parece muy enriquecedor”, destaca.
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