Expertos en alimentos funcionales se dieron cita en la Universidad de Valparaíso
Equipo nacional multidisciplinario se reunió en la Facultad de Farmacia, para analizar propiedades saludables de los alimentos funcionales.
Un equipo multidisciplinario integrado por investigadores de ciencias farmacológicas, fisiológicas, bioquímicas, médicas y de los alimentos, pertenecientes a la Universidad de Valparaíso, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico, Fondef, se reunieron este jueves en la Facultad de Farmacia de la UV, con el objetivo de participar en el seminario “Modelos para la evaluación de bioactividad en alimentos funcionales”. El encuentro se enmarcó en las actividades del proyecto Fondef “Diseño, producción y evaluación de jugos de uvas con propiedades funcionales que contribuyan a la promoción de la salud de la población”.
El programa académico del seminario comprendió un ciclo de conferencias impartidas por expertos en la disciplina, quienes mostraron y analizaron las herramientas disponibles para la validación de las propiedades saludables de los constituyentes bioactivos presentes en alimentos funcionales, a través de ensayos in vitro, in vivo y clínicos.
Mariane Lutz, directora del Centro de Desarrollo de Alimentos Funcionales, Cidaf, de la Facultad de Farmacia de la UV y directora del referido del proyecto Fondef, explicó que se entiende por alimentos funcionales aquéllos que tienen uno o más componentes que satisfactoriamente demuestran afectar beneficiosamente una o más funciones determinadas del organismo, además de sus efectos nutricionales fundamentales, de manera que son relevantes tanto para mejorar el estado de salud y el bienestar y/o para reducir el riesgo de una enfermedad.
“Nunca nos olvidemos de que un alimento funcional debe ser un alimento y debe demostrar sus efectos en las cantidades que normalmente se consumen en la dieta”, subrayó la investigadora, agregando que los alimentos funcionales forman parte de la dieta habitual y debieran ejercer sus efectos en las cantidades que cada persona normalmente los consume. “Si usted se bebe 50 tazas de té para obtener un efecto beneficioso, ese té no es funcional, así de claro”, sostuvo, y añadió que esto hace que quede inmediatamente fuera cualquier cosa que no se coma, como por ejemplo cápsulas o cualquier otra forma de producto concentrado, porque no son alimentos. También se refirió a los compuestos bioactivos de los alimentos, como por ejemplo los ácidos grasos, el omega 3 y los citoesteroles, entre otros.
El programa temático del seminario comprendió las exposiciones de las siguientes conferencias: “Ensayos in vitro: modelo de células tumorales”, “Modelos animales patológicos y su aplicación en la evaluación de compuestos bioactivos”, “Evaluación de compuestos bioactivos en la función vascular: bases farmacológicas y modelos experimentales”, “Utilidad de la línea celular Caco-2 como modelo para el estudio de la absorción de compuestos bioactivos”, “Evaluación de compuestos bioactivos en la función neuronal”, “Biomarcadores de efecto y ensayos de tipo clínico” y “Quimiometría aplicada al diseño experimental”.