Su segundo período como rector de la Universidad de Valparaíso inició oficialmente este martes 14 el profesor Osvaldo Corrales, período que se extiende desde el 15 de enero de 2025 hasta el 15 de enero de 2029. En la ceremonia realizada en la ocasión, la autoridad universitaria presentó un recuento y evaluación de los primeros cuatro años de su ejercicio, así como perfiló los desafíos centrales de esta segunda etapa.
El acto fue encabezado por el presidente de la Junta Directiva de la UV, Gerardo Donoso Barreto, junto a los vicerrectores académico, Carlos Becerra; de Gestión Institucional, Christian Corvalán; de Investigación e Innovación, Juan Sandoval, y de Vinculación con el Medio, Carlos Lara. Les acompañaron el secretario general subrogante, Ricardo Bravo; el contralor universitario, Cristian Moyano; la fiscal de la institución, Daniela Montecinos; decanas y decanos, directivos centrales y quienes asumirán nuevas funciones durante el nuevo período rectoral.
En la oportunidad, el secretario general subrogante dio lectura a extractos atinentes del Decreto Supremo número 0167 del 26 de noviembre de 2024, firmado por el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, que nombra al profesor Osvaldo Corrales como rector de la UV.
Luego de ello, hizo uso de la palabra el doctor Corrales, quien agradeció el apoyo de las y los académicos que participaron en la votación en que resultó electo, en la que a pesar de presentarse como candidato único, contó con un importante apoyo que sobrepasó el quórum requerido. Asimismo, entregó un resumido y a la vez detallado recuento de los cuatro años precedentes, que se iniciaron en plena pandemia, el 2020, lo que requirió de un especial esfuerzo para afrontar las difíciles condiciones de entonces, y que asimismo implicaron la participación de la Universidad de Valparaíso como un activo agente de apoyo al país.
De igual forma, Corrales se refirió al exitoso proceso de autoevaluación, que culminó con la acreditación por seis años de la casa de estudios, que de esta forma se posiciona como universidad de excelencia. También destacó los niveles de matrícula de primer año, que subió de dos mil 933 estudiantes matriculados el 2021 a tres mil 549 el 2024, el mejor resultado de los últimos cinco años, ubicando a la UV como la universidad más postulada de la región.
Abordó asimismo los datos de titulación oportuna; la retención de estudiantes de primeros años; la docencia de postgrado; el decreto de la nueva carrera académica; la actualización del Modelo Educativo; los resultados de la investigación, la innovación y la transferencia tecnológica; la adjudicación de importantes fondos estatales; la vinculación con el medio, ejercicio que vincula de manera creciente a la casa de estudios con la comunidad y el territorio; la internacionalización y los diversos convenios suscritos con entidades e instituciones extranjeras.
Respecto de la gestión institucional, Osvaldo Corrales destacó que ha sido necesario asumir desafíos muy relevantes, en un escenario de restricciones y crecientes complejidades a pesar del cual se han recuperado los equilibrios financieros, aumentando asimismo el patrimonio institucional.
Continuó refiriéndose a la modernización digital y el proceso de encasillamiento del personal no académico, tras lo cual destacó el esfuerzo institucional por eliminar toda forma de acoso, abuso, maltrato y discriminación al interior de la universidad, así como de promover formas de convivencia basadas en el respeto mutuo y exentas de toda forma de violencia. Destacó los avances en la superación de las brechas de género, así como la preocupación por la salud mental y la prevención de conductas de riesgo, aunque apuntó que queda mucho por hacer y que los desafíos en estos temas superan con creces los recursos de que la institución dispone para afrontarlos. Subrayó asimismo el compromiso con el ambiente y el ecosistema.
Corrales destacó las buenas noticias asociadas a la posición de la UV como institución de excelencia, como también el liderazgo de la casa de estudios en la discusión nacional sobre la política pública en educación superior y su presencia en el espacio internacional.
“En síntesis —afirmó—, creo que hemos acometido con éxito los principales desafíos que nos habíamos propuesto, y que en términos generales la Universidad de Valparaíso es hoy una institución mejor y más prestigiosa que lo que era cuatro años atrás, estando dichos avances enmarcados en una trayectoria de mejora continua que comenzó el año 2008 y que hemos sabido mantener y proyectar”.
Desafíos
Para su nuevo período de gobierno —el último que podrá encabezar—, se refirió a los desafíos que habrá que enfrentar y que “pondrán a prueba nuestra capacidad de adaptación”, debido tanto a las exigencias que enfrentan las instituciones de educación en el mundo, con un profundo cambio en todas las disciplinas, como al difícil escenario para la educación pública en Chile, que representa menos del quince por ciento de la matrícula total del país.
“Enfrentamos desafíos muy sustantivos, los que definirán en buena medida el futuro de nuestra institución. Lo hacemos —como no es novedad— en un entorno que sigue siendo sumamente adverso para la educación pública en general y para las universidades del Estado en particular”, expresó el rector al cerrar sus palabras, subrayando que el compromiso del gobierno por fortalecer a las universidades del Estado “se mantiene incumplido”. Afirmó que el año será “complejo en términos de financiamiento, como de hecho lo han sido los años previos; sin embargo, los logros que hemos alcanzado en todos los ámbitos de desarrollo de la universidad, y que se han visto refrendados por nuestra reciente acreditación de seis años, hacen que a pesar de la adversidad podamos ver el futuro con esperanza. Cuando asumí mi primer período, dije que mi objetivo era que nos sintiésemos orgullosos y orgullosas de pertenecer a la Universidad de Valparaíso, y creo que hoy todos y todas lo estamos un poco más que hace cuatro años”.
Nota: Lorena Ruiz / Fotos: Denis Isla
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