Claudio Marín dirige montaje que se realizará este viernes 10 y sábado 11 de enero, a las 20:30 horas.
Poner en valor la memoria colectiva y personal en distintos espacios que cuentan con alta carga histórica en Valparaíso es el objetivo de la escenificación performativa “Palomario”, a cargo de Claudio Marín, director de la Escuela de Teatro UV, que se presentará el viernes 10 y sábado 11 de enero, a las 20:30 horas, en el cementerio n°3 de Playa Ancha, con entrada liberada y abierto a todo público.
El proyecto, que cuenta con un destacado equipo artístico vinculado a la Escuela de Teatro UV, se sitúa en el espacio público desarrollando los conceptos de sitio específico e instalación como ejes sensibles al contexto no solo en lo referido al espacio exterior en el que esta pieza se exhibe, sino que también a partir de las condiciones sociales y políticas del país.
A juicio del director Claudio Marín, “esta instalación específica intenta resignificar las condiciones de lo público y lo social, influyendo en la recepción directa del espectador, porque se trata de un trabajo artístico que se debe replantear dependiendo del lugar donde se emplace”.
De hecho, el montaje ya se ha presentado en la tornamesa de Barón y luego del cementerio llegará hasta Algarrobo, para finalizar sus presentaciones en el Parque Cultural de Valparaíso. Al respecto, Marín asegura que “la obra corresponde a un manifiesto que permite resignificarla constantemente dependiendo del lugar donde se presente, de modo que cambia tal como lo hace la dramaturgia, porque el espacio es que el dialoga con la obra”.
El texto “Palomario” se origina a partir de la residencia artística “Políticas del Espacio”, con la participación del dramaturgo Emilio Arriagada, mientras que la versión escénica pone en tensión la memoria y el olvido a través de un hijo, su mamá y su abuela, tres roles de una familia atravesada por la muerte, donde se toma la figura de la paloma como la representación de un puente entre el presente y el pasado.
Marín asegura que “la apuesta del montaje es salir del denominado edificio teatral para emplazarse en zonas de memoria, lo cual nos ha servido para estar más cerca de la comunidad. Sin duda es una gran experiencia visitar el cementerio, no solo por lo que significa o por su valor arquitectónico, sino porque la performance se desarrolla en un lugar que no está diseñado para ello y eso es notable”.
“Valparaíso está lleno de sitios que tienen una carga histórica fundamental, los cuales son muy interesantes, porque nos interesa que la gente se integre a esta intervención espacial para que no tengan que ir al teatro y de esa forma puedan tener una experiencia estético-sensorial frente al texto, por medio de una puesta en escena contemporánea”, agrega.
La obra, que cuenta con financiamiento del Fondart Regional de Creación artística 2019 tiene en el rol protagónico a la destacada actriz Naldy Hernández, junto a Katherine King y Juan Esteban Meza, profesor de la Escuela de Teatro UV, más la música en vivo del cellista Leandro Varas.
El diseño escénico pertenece a Tamara Figueroa, la producción general es de Christopher Ortega y como jefe técnico está Pablo Lobos, todos de la Escuela de Teatro UV.
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