Recuperaron espacio en colegio David Ben Gurión del cerro Las Cañas.
Un proyecto de recuperación de un microbasural de residuos sólidos domiciliarios realizaron estudiantes de la Escuela de Ingeniería Ambiental, en conjunto con la ONG Alimapu, en el Colegio David Ben Gurión del cerro Las Cañas. El trabajo, que se desarrolló durante todos los días sábado desde agosto hasta octubre, incluyó la entrega de técnicas de reutilización y reciclaje para minimizar la contaminación ambiental del sector.
El lugar, afectado por el megaincendio de 2014, fue convertido en un aula al aire libre, con composteras, huertas cuadradas y en espiral, asientos y plantación de hierbas medicinales y aromáticas, junto con flores de ornamentación. Entre los principales productos logrados se cuentan la reutilización de botellas en jardineras verticales, reciclaje de materia orgánica, junto con la construcción e implementación del aula al aire libre.
Reconstrucción de comunidades
Durante la ceremonia de cierre de proyecto, la seremi de Gobierno, Katherine Araya, explicó que “hoy día queremos agradecer a la escuela David Ben Gurión, pero en especial a la Universidad de Valparaíso y a su Escuela de Ingeniería Ambiental, por comprometerse con la comunidad, en un sector que ha sido tan vulnerado, a través de este megaincendio”.
“Los universitarios estuvieron trabajando fuertemente en este sector y hoy día con alegría podemos ver que la reconstrucción no es solo de viviendas, sino que también se reconstruyen comunidades y la Universidad de Valparaíso ha sido fundamental en ese quehacer”, agregó.
En tanto, Mario Vásquez, director de la Escuela David Ben Gurión, manifestó que “la importancia que tiene este proyecto es darle a nuestros alumnos una motivación sobre lo que significa el medioambiente, puesto que es una escuela que está en el cerro Las Cañas, que sufrió fuertemente el embate del fuego y por lo tanto aquí hay que crear una cultura que responda a esa necesidad, que es salvaguardar el medioambiente”.
Aula al aire libre
Catalina Ponce, presidenta del Centro de Estudiantes de Ingeniería Ambiental, a cargo del grupo de alumnos que participó en la recuperación, explica que “fue un trabajo muy satisfactorio, porque el lugar era un espacio donde se guardaban las sillas rotas, las mesas, era un sitio que estaba olvidado... Empezamos por emparejar el piso, porque todo estaba en desnivel, luego pusimos el cemento, hicimos el compostaje, y al final pusimos las plantas y las flores. Todo fue hecho de forma voluntaria por los estudiantes de la carrera”.
Catalina agrega que “lo más más importante es ver el impacto que estas acciones generan, porque en el aula muchas veces se enseñan cosas teóricas, pero en la práctica hay muy poco espacio para realizar estas iniciativas. Recuperar un espacio que estaba totalmente perdido y convertirlo en un aula al aire libre puede servir para las nuevas generaciones de estudiantes, ya que como alumnos de una universidad pública y estatal, debemos tener conciencia con el medioambiente”.
En tanto, Bastián Riveros, estudiante de Ingeniería Ambiental UV e integrante de la Confederación de Estudiantes de las Ciencias Ambientales de la Educación Superior, señaló que “el trabajo con los niños es fundamental en nuestra carrera, la educación ambiental es parte de nuestra formación. Si nosotros les inculcamos desde pequeños una base de educación ambiental a los niños, ellos pueden crear conciencia ambiental y eso sería significativo, porque les serviría en su vida cotidiana”.
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