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Gran convocatoria registró I Encuentro Regional de Trabajo Social organizado por estudiantes

08 Junio 2015

La iniciativa pretendía reflexionar sobre los nuevos desafíos que enfrenta esta profesión a 90 años de su fundación formal y plantear una reconceptualización vanguardista.

Superando todas las expectativas iniciales, se desarrolló con gran convocatoria y participación, el I Encuentro Regional de Trabajo Social-Quinta Región, organizado por estudiantes de esta carrera de las universidades de Valparaíso, Andrés Bello y Santo Tomás.

El evento se efectuó el viernes 5 y sábado 6 de junio de 2015 en el Aula Magna Victorio Pescio de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, y contempló en el acto de inauguración las intervenciones del prorrector de la Universidad de Valparaíso, Christian Corvalán; de la directora de la Escuela de Trabajo Social UV, profesora Elena Salum; de la directiva del Colegio Provincial de Asistentes Sociales, María Angélica Barrientos y de la representante de la Comisión Organizadora, Isadora López.

Asistieron además a la sesión de apertura, el director de la Escuela de Trabajo Social de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Dagoberto Salinas, y el director de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad Andrés Bello, Rodrigo Cortés, además de directivos (as) del Colegio Provincial de Asistentes Sociales y Trabajadores (as) Sociales de Valparaíso y representantes de la Coordinadora Interregional de Trabajadores (as) del Área Social. Además, concurrieron profesores, profesionales y estudiantes de varias regiones del país.

En la oportunidad, el prorrector Christian Corvalán, quien además es profesor de la Escuela de Trabajo Social UV, llamó a los estudiantes a cultivar el desarrollo de las “habilidades blandas”, ya que dijo que en esta profesión son especialmente importantes: “Éstas tienen que ver con elementos relacionales como la tolerancia, el trabajo en equipo, la capacidad de acompañar y comunicarse, el ser capaces de construir acuerdos y de entenderse y eso implica un largo camino, un proceso de aprender y valorar y aunque esto lleve su tiempo, en esta disciplina se aprecian mucho los procesos”.

Asimismo, felicitó a los estudiantes organizadores del certamen, quienes desde noviembre de 2014 trabajaron arduamente para poder materializarlo y les señaló que “la Universidad de Valparaíso siempre apoyará iniciativas como éstas donde se aprecia el esfuerzo y tenacidad de sus alumnos por llevar a cabo actividades que tengan un impacto en la sociedad y que promuevan la participación”.

Por su parte, la directora Sara Salum, manifestó que es “necesario y saludable” revisar los problemas que enfrenta el Trabajo Social chileno, a 90 años de su fundación como disciplina formal, ya que los cambios sociales, culturales y tecnológicos “nos llevan a afrontar nuevos desafíos y es momento para que nos cuestionemos críticamente como profesión, de manera que nos adaptemos a las nuevas realidades y prestemos un mejor servicio a la comunidad”.

Agregó que en este sentido, “en Chile faltan más espacios de discusión y para plantear críticas propositivas y por eso celebro este espacio convocado por los estudiantes para compartir experiencias innovadoras y de análisis de los temas emergentes, además, es motivo de mucha alegría para la Escuela de Trabajo Social UV contar con este tipo de eventos en el año en que se celebra el 70º aniversario de su fundación”.

La directora dijo asimismo que esperaba que esta instancia se transforme en un encuentro sustentable en el tiempo y se consolide como tradición estudiantil de reflexión académica.

Posteriormente se dirigieron a los presentes la encargada de Derechos Humanos del Colegio de Asistentes Sociales de Valparaíso, María Angélica Barrientos, y la representante de la Comisión Organizadora, Isadora López.

La estudiante manifestó que este I Encuentro nació a raíz de la inquietud de los alumnos por “reflexionar colectivamente sobre qué espera la sociedad de nosotros y que esperamos nosotros aportar a la sociedad” y agregó que esta instancia “nos abre la posibilidad de revisarnos y evaluarnos como disciplina y abrir posibilidades de actualización y de cambios al interno de la profesión y de rescatar el ánimo reconceptualizador que hace 40 años invadió gran parte del trabajo social latinoamericano”.

Isadora López acotó que estas reflexiones y debates “deberían cumplir algunas condiciones, como no caer en análisis mediante miradas cortoplacistas, reduccionistas, simplistas o tecnocráticas y debemos propender plantear agendas de trabajo e investigación, con temas que sean prioritarios para enfrentar el trabajo social chileno antes del centenario, sin lógicas individualistas y siempre pensando colectivamente”.