Representantes de carreras se manifestaron en Valparaíso en contra de proyecto de ley que las margina.
Estudiantes y profesores de varias carreras del área de salud, que imparten las universidades de la región, se manifestaron por las calles de Valparaíso respecto al proyecto de ley de exclusividad universitaria, que se tramita en el Congreso Nacional, y que hasta el momento dejaría en ese estatus solo a las carreras de Enfermería y Obstetricia, excluyendo a programas académicos como Nutrición y Dietética, Fonoaudiología, Tecnología Médica, Kinesiología y Terapia Ocupacional.
La marcha se inició esta mañana en el Arco Británico y tuvo una convocatoria que superó los 300 alumnos y profesores y finalizó en el Congreso Nacional, donde se manifestaron pacíficamente en el frontis. Con vítores y cánticos los alumnos expresaron su estado de alerta frente a la tramitación legal del proyecto de ley en el marco de la celebración del Día Nacional de los kinesiólogos y nutricionistas.
Paz García Campos, secretaria general del Centro de Alumnos de Kinesiología de la Universidad de Valparaíso, calificó como una irresponsabilidad del parlamento dejar fuera del proyecto de ley de exclusividad universitaria las carreras del área de la Salud antes mencionadas: “Nos pusimos de acuerdo para salir a manifestarnos hoy 6 de mayo, Día de los Kinesiólogos, para expresar nuestro descontento de que no seamos exclusividad universitaria. Es una irresponsabilidad frente a la salud, nosotros trabajamos con personas, por lo que tenemos que hacernos cargo de la educación que se imparte a nuestros compañeros”.
La estudiante aseguró que “actualmente el ministerio tiene un código que señala que en el sistema público no se contratan estudiantes egresados, que no sean de universidades. El tema es que los que están en institutos -no sé si no lo saben aún- cuando egresen no van a tener trabajo en el sistema público”.
{b}Atentado contra la calidad{/b}
Las autoridades académicas del área de la salud de la Universidad de Valparaíso también rechazaron el proyecto tramitado en la Cámara de Diputados. El decano de la Facultad de Medicina, Antonio Orellana, dijo que la determinación es contraria a la evidente necesidad que tiene Chile de avanzar en materia de calidad en Educación Superior y, además, promueve directamente el deterioro del ya desgastado sistema público de salud, dado que afecta la estructura de los equipos multidisciplinarios que ejercen en hospitales y centros de atención primaria.
“La atención eficiente hoy la brindan equipos multidisciplinarios y no especialistas en solitario, por lo que la separación establecida en el citado proyecto de ley afecta no sólo a la formación de los profesionales involucrados, sino también al cumplimiento de los objetivos y metas definidos por las propias autoridades de gobierno para la gestión de los servicios involucrados”, afirmó el decano.
Su opinión fue refrendada por Andrés Orellana, Patricio Valdebenito y Andrés Ibarra, directores de las escuelas de Kinesiología, Fonoaudiología y Tecnología Médica, respectivamente, quienes afirmaron que el veto de los diputados representa un “atentado contra la calidad”.
Según precisaron, hoy la sociedad requiere contar con profesionales muy bien formados, que posean conocimientos y competencias que les permitan desempeñarse con acierto en su campo profesional, que hayan tenido la experiencia clínica adecuada y compartan un nivel de conocimiento y visión ética estandarizado, lo que hoy –a su juicio- los institutos o CFT no están en condiciones de poder cumplir en dichas disciplinas.
En tanto, la directora de Escuela Nutrición y Dietética, Marcela Alviña, sostuvo que la salud de las personas debe ser considerada esencial para el desarrollo de la sociedad, “pues la complejidad de resguardar y preservar la vida de la población, la sitúa en un estatus de mayor prioridad, dejarla solamente al arbitrio del mercado es un acto de irresponsabilidad inexcusable. Nuestro país necesita de profesionales formados con un enfoque integral del bien común, conciencia ética, y búsqueda de nuevos conocimientos que beneficien al conjunto de la sociedad. El resultado de la votación, al aceptar sólo a dos profesiones del equipo de salud y rechazar otras cinco, resulta en un acto de discriminación inaceptable”.
Visión gremial
Por su parte, la presidenta del regional Valparaíso del Colegio de Fonoaudiólogos y docente de la Escuela de Fonoaudiología de la UV, Casandra Araya, afirmó que confía en que la Comisión de Educación del Senado reincorpore al proyecto las carreras que fueron rechazadas por la Cámara de Diputados.
“Algunos parlamentarios han señalado que se oponen a la exclusividad universitaria porque estiman que esta es una medida que discrimina a los estudiantes de institutos profesionales. En verdad es la actual ley la que discrimina, toda vez que establece diferencia para los estudiantes y afecta la labor de los equipos multidisciplinarios de salud”, dijo Araya.
Asimismo precisó que si la exclusividad no se hace extensiva a dichas disciplinas, los parlamentarios estarán apoyando indirectamente la idea de lucro en la educación, ya que los alumnos que las estudian en institutos no tienen acceso –por ley- a campos clínicos para tratar casos de pacientes de alta complejidad, por lo que su formación es incompleta y los deja en desmedro frente a los egresados universitarios.
{b}Trámite legislativo{/b}
El 22 de abril recién pasado, la Cámara de Diputados aprobó en votación en sala la incorporación de las carreras de Enfermería y Obstetricia en dicho proyecto de Ley de Exclusividad Universitaria para profesionales de la Salud. Sin embargo, en paralelo, rechazó incluir a las restantes disciplinas en la moción.
La iniciativa se presentó en 2005 y originalmente comprendía también a las carreras de Kinesiología, Fonoaudiología, Nutrición y Dietética, Tecnología Médica y Terapia Ocupacional, pero a petición de parlamentarios, finalmente estas últimas cinco fueron votadas en artículos separados.
En el caso de Enfermería y Obstetricia, el resultado de la votación fue de 92 votos a favor y 1 voto en contra). Las restantes obtuvieron 62 votos a favor, 26 en contra y 2 abstenciones, por lo que fueron rechazadas al no alcanzar la votación mínima de 69 votos para su aprobación, y este miércoles la Comisión de Educación del Senado evaluará si la reincorpora. Si eso acontece, será enviada a trámite en comisión mixta, de lo contrario, quedarán fuera del proyecto aprobado y deberán esperar al menos un año para volver a ser presentada una moción similar en el Congreso
El texto legal indica, asimismo, que los institutos profesionales que imparten las dos primeras carreras no podrán incorporar nuevas promociones, a contar de un año de la publicación de esta ley. En tanto las universidades que las impartan, deberán establecer planes y programas especiales para aquellos profesionales que hayan obtenido su título en institutos profesionales reconocidos por el Estado, con la finalidad que puedan cursar en ellas y optar al grado de licenciado en dichas especialidades.
Las anteriores especificaciones no regirán para las carreras que no fueron incluidas en el proyecto, el que ahora deberá ser visto por el Senado.
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