El programa “Universidad inclusiva” busca promocionar la salud a través de la educación.
Más de cien estudiantes en situación de discapacidad tienen hoy las universidades pertenecientes al Consejo de Rectores de Valparaíso, las que cobijadas bajo el lema “Diferentes somos todos”, este miércoles conmemoraron el Día Internacional de la Discapacidad en una feria informativa en plaza Sotomayor.
La actividad, que congregó a representantes de las universidades de Valparaíso, Católica de Valparaíso, de Playa Ancha y Santa María, se enmarca en el programa “Universidad inclusiva”, que busca promover la salud a través de la educación, y que hoy desarrollan junto a la Corporación Ciudad Accesible, con quienes firmaron un compromiso en octubre pasado.
Al respecto, el rector de la Universidad de Valparaíso, Aldo Valle, quien además es el presidente del Consejo de Rectores de Valparaíso (CRUV), señaló que este proyecto conjunto de las casas de estudio de la región busca “desarrollar acciones concretas respecto a la inclusión, con el fin de atender de modo específico las limitaciones o dificultades que tienen nuestros estudiantes y con las que ven disminuidas sus oportunidades, porque las universidades no las hemos atendido”.
Por su parte, Paula Prett, de Ciudad Accesible, sostuvo que esta iniciativa surgió desde las universidades, con el objetivo de hacerlas más inclusivas. “Se van a tratar distintos aspectos, y entre los que más nos interesa fomentar está la importancia de la accesibilidad física en las universidades, con la finalidad de que algunos alumnos con discapacidad puedan ingresar y desplazarse en igualdad de condiciones que el resto de sus compañeros”.
Universidades inclusivas
Cada una de las universidades ha desarrollado proyectos que buscan transformar sus espacios en lugares accesibles, como también cambiar la actitud de académicos, funcionarios y estudiantes respecto al tema de la discapacidad.
En el caso de la UV se han desarrollado modificaciones tanto físicas en las escuelas y facultades, como también en los currículos académicos, iniciativa coordinada por la Dirección de Asuntos Estudiantiles, destacando la inclusión de asignaturas de formación general.
“Creemos que las dificultades que tenemos y llamamos discapacidades en los demás, son limitaciones y sesgos que tenemos en nuestra manera de ver a las personas que tienen alguna limitación física. Somos nosotros los incapaces de imaginar que las personas pueden desenvolverse perfectamente”, manifestó el rector.
Mientras que su par de la USM, José Rodríguez, agregó que la casa de estudios trabaja en la concientización de sus estudiantes. “Tenemos que buscar a los jóvenes y que deje de ser tabú o un motivo de vergüenza tener algún tipo de discapacidad. Todos tenemos alguna necesidad, la idea es llegar a ellos y ver cómo podemos ayudarlos”.
En tanto, Claudio Elórtegui, rector de la PUCV, destacó que no sólo los cambios físicos son importantes en una universidad. “Tenemos que crear conciencia entre los profesores, que las carreras y las escuelas se den cuenta de lo que significa tener estudiantes con distintos tipos de discapacidad. Esta es una tarea de largo aliento en la cual estamos en los primeros pasos”.
En esta misma dirección el rector de la UPLA, Patricio Sanhueza, agregó que es muy importante que las casas de estudio demuestren interés y responsabilidad en temáticas relacionadas a la inclusión. “Los alumnos que comparten con las personas que tienen necesidades educativas especiales aprenden mucho más. Convivir con personas con estas características hace creer mucho a quienes no tienen este problema, y eso es para nosotros una forma de educar”.
Un Valparaíso amable
En esta actividad también estuvieron presentes los miembros de la ONG “Valparaíso para todos”, una organización que desde la experiencia de sus miembros busca ser un aporte al desarrollo de aquéllos que aún temen ser discriminados.
Polo León es uno de sus integrantes. Reconoce que Valparaíso es una “ciudad amable pero no accesible”, ante lo que junto a sus compañeros han desarrollado un proyecto que busca plasmar en un libro indicaciones y recomendaciones para que quienes tengan diferentes tipos de discapacidad no teman a la ciudad.
“La idea es hacer que los discapacitados se tomen los lugares públicos y privados y que se empoderen de la ciudad. Que conozcan los lugares de Valparaíso, el puerto, los cerros, que son cosas hermosas y que no se ven en otras ciudades. Queremos que las personas en situación de discapacidad quieran salir y sus familias no tengan temor de que sus hijos serán discriminados o van a ser tratados mal”, puntualizó.
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