Así lo indica encuesta realizada por el Instituto Chileno de Estudios Municipales, Ichem, de la Universidad Autónoma.
Un 65 por ciento de la población prefiere las universidades públicas, mientras 27 por ciento escoge las privadas. Así lo indica una encuesta realizada por el Instituto Chileno de Estudios Municipales (Ichem) de la Universidad Autónoma. El universo lo conformaron mil 349 personas mayores de 18 años, residentes en todo el país.
Un segundo dato revelado por el estudio es que los planteles públicos son preferidos por el grupo socioeconómico ABC1, donde esta opción marca un 71 por ciento, y el C2, con 70 por ciento.
Daniel Flores, académico de la Universidad Autónoma vinculado al referido estudio, en conversación con el programa “RVL noticias”, de radio Valentín Letelier de la UV, explicó que “desde el año pasado que estamos haciendo un estudio de educación con una representatividad nacional, aunque estamos todos los años estudiando, desde hace seis años, las diferentes temáticas que tienen que ver con lo municipal, con lo público. Nos motiva fundamentalmente conocer la subjetividad de las personas, la sociología de las personas con respecto a estos temas”.
Según Flores, el objetivo de la encuesta era sondear la oposición público-privada. “Y en efecto, la gente tiende a preferir más las universidades públicas antes que las privadas”, afirmó.
Para el académico, a partir de este estudio “lo que resulta como más interesante es el proceso de lo público-privado que tiene la gente en la cabeza. Porque resulta que el 70 por ciento de la gente prefiere tener a sus hijos en colegios particulares —particular subvencionado o particular pagado—, mientras solamente un 24 por ciento de la gente está prefiriendo, a nivel básico y medio, la educación pública. Pero cuando pasamos a la universitaria, la gente prefiere la universidad pública”.
Sin embargo, agregó, “ese segmento que más prefiere la universidad pública es el segmento más acomodado del país. Las clases medias del país, por decirlo así, están prefiriendo cada vez más las universidades privadas: un 54 por ciento prefiere la pública y el resto prefiere las privadas. Entonces ahí como que uno puede ir dándole una vuelta al dato y se da cuenta de que en realidad pareciera que la imagen de la privada tiene que ver con que está respondiendo a la expectativa y a las realizaciones de las clases medias del país, y las élites están asumiendo el tema de la universidad pública tal vez no por lo público, sino por el concepto o la marca de la universidad pública”.
Consultado sobre si la decisión entre universidad privada o pública dependería de los sistemas de ingreso, Daniel Flores indicó que “el año pasado hicimos un estudio un poco más preciso al respecto, en medio de las movilizaciones: pareciera que tiene más que ver con una cosa que ya dicen hace mucho tiempo los sociólogos que trabajan estos temas: muchas veces la educación más que responder a un mecanismo de movilización social o ascensión social, es una máquina de diferenciación social. Vemos que hace 20 años o más la gente con mejores ingresos tenía a sus hijos en colegios particulares y después en universidades públicas, y eso sigue repercutiendo ahora en el actual formato de ingreso a la universidad. Finalmente las pruebas de admisión lo que hacen es ver si estuviste en un buen colegio o no. Por eso es que uno de los mecanismos más eficientes, que está también muy conversado entre los tecnócratas dedicados a esto, tiene que ver con el ranking de los alumnos dentro de sus propios colegios: si les fue bien en el colegio seguramente les va a ir bien en la universidad, lo que no quiere decir que si le fue bien en la PSU les va a ir bien en la universidad necesariamente. El ranking del colegio es mucho mejor estimador de éxito que la PSU”.
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