Especialista holandesa expuso en la UV sobre el cuidado de los pacientes con demencia
Henriëtte van der Roest fue invitada por la Escuela de Psicología.
Cómo cuidar a los pacientes con demencia es un tema poco conocido en Chile, y no existe una política pública al respecto, sólo algunos programas o lineamientos enfocados al tratamiento de los afectados. El tema fue abordado en la Escuela de Psicología de la UV, en el seminario “El proyecto STAR: enfrentamiento de destrezas para cuidadores de pacientes con demencia”, dirigido por la psicóloga holandesa Henriëtte van der Roest.
En Europa existen planes nacionales de cuidado al paciente que padece demencia, a los cuales se refirió la especialista de la Universidad Vrije de Amsterdam. “Hay muchas terapias, pero es común en Holanda observar situaciones específicas de la demencia en las que se puede ayudar, por ejemplo, tocando música o conociendo personas. Hay diversos caminos para observar la dimensión de la demencia”, indicó Henriëtte van der Roest.
La psicóloga señaló que hay mucha información sobre las dimensiones de la demencia, y añadió que en el contexto europeo se registra un aumento de los pacientes afectados, del que parte una creciente necesidad de capacitación en el cuidado. Resulta fundamental, señaló, la integración que debe existir entre el paciente con demencia y su cuidador.
En Chile, dicha relación es aislada, lo que genera insatisfacción y menor calidad de vida para ambos, paciente y cuidador. “Es importante cuidar a ambos, al cuidador y a la persona con demencia, y para eso existen bastantes terapias”, explicó la académica de la Escuela de Psicología de la UV, Claudia Miranda.
Los cuidadores pueden ser formales —personas contratadas o pagadas— o informales, que en la mayoría son parientes del paciente. “Cuando se habla del familiar, se enfoca al pariente principal que generalmente se hace cargo; puede ser uno o dos, y ellos pueden estar expuestos a problemas de salud mental o de salud física, de modo que tienes que tomarlos a ellos y atenderlos”, indicó Claudia Miranda.
La especialista destacó que si existe en la familia algún integrante con demencia, no hay que aislarlo, pero sí buscar grupos de ayuda. Asimismo, hay que recurrir a una ayuda especial para el cuidador, para evitarle problemas de salud mental.
“Es bueno vivir el día a día y no preocuparse mucho por el futuro ni observar si esto tendrá algún termino, ésa es la mejor forma de resolver los problemas que se van presentando. La idea es que a futuro exista algún programa que ayude a los cuidadores y a las personas con demencia a enfrentar la enfermedad”, comentó.
La psicóloga Henriëtte van der Roest asistió a la UV gracias al proyecto Fondecyt “Necesidades y calidad de vida de personas con demencias y sus cuidadores”, con el fin de exponer la experiencia de investigación europea.