Clowns de Compañía La Lumbrera aconsejaron celebrar a carcajadas el Día mundial de la risa
El grupo conformado por estudiantes de la Universidad de Valparaíso visitó a los niños del Servicio de Pediatría del hospital Carlos van Buren y llamó a la sociedad a enfrentar la vida de una manera más positiva.
Sonreír, sonreír, sonreír. Es el consejo que los clowns de la compañía La Lumbrera, conformada por quince estudiantes de la Universidad de Valparaíso, otorgan como remedio infalible contra la tristeza y la enfermedad, en el marco de la celebración del Día Mundial de la Risa. En el marco de las conmemoraciones, y también como parte de su trabajo habitual, el grupo visitó a los pacientes del Servicio de Pediatría del hospital Carlos van Buren, con el fin de ayudarlos a sanar a través de la sonrisa.
El grupo de clowns funciona desde hace tres años, y durante todo ese período se ha dedicado a realizar visitas a los pacientes infantiles y adultos del centro hospitalario porteño. Sebastian Peña, estudiante de Kinesiología, sostuvo que “me parece fantástico que se celebre el Día Mundial de la Risa, porque qué mejor instancia para recordarles a todas las personas que tenemos que sonreír, que pase lo que pase, que aunque la vida nos ponga siempre pruebas, nosotros tenemos que enfrentarla con una sonrisa: créanme que eso va a hacer que las cosas se resuelvan mejor”.
Por su parte, Nadia Salazar, estudiante de Obstetricia y Puericultura, aseguró que el trabajo que realizan con los niños definitivamente ha tenido efecto. “Como compañía llevamos harto tiempo trabajando en el hospital Carlos van Buren y nos hemos dado cuenta de que nuestro trabajo tiene mucho efecto, porque los niños se sienten mejor después que nosotros venimos. Sabemos que cuando están con nosotros se sienten mejor, se olvidan un poco de que están hospitalizados y que tienen una enfermedad, y eso es muy importante para nosotros, porque es la retribución que tenemos, es cómo nos vemos recompensados. Nosotros somos una agrupación de la Universidad y trabajamos sin fines de lucro, entonces estamos supercontentos de que los niños y los papas se rían con nosotros, ésa es la mejor paga”.
Sebastian Peña añadió que ellos se han encargado de tomar en cuenta el aspecto psicosocial de la enfermedad. “Todo el entorno de salud está preocupado de hacer su trabajo, de poner la sonda, del tratamiento, de la rehabilitación, y nosotros nos preocupamos del otro aspecto, de poder conversar con el paciente, de conocerlo”.
Ver las cosas diferente
Según la última Encuesta Nacional de Salud, en Chile una de las enfermedades destacables por su frecuencia y gravedad potencial es la depresión: uno de cada cinco adultos tuvo alguna vez síntomas depresivos. Ante este dato, Sebastian Peña aconseja ver la vida de forma diferente: “La vida es algo que debemos aprovechar; debemos andar siempre con una cara bonita, y la mejor cara que tenemos en cualquier parte y en cualquier momento, es la sonrisa. Si miramos la vida con una sonrisa, las cosas van a estar mejor y van a pasar de mejor forma, e incluso van a conspirar para que resulten a favor de nosotros”.
Y para poder reírse, el joven Peña asegura que sólo basta con querer hacerlo. “Uno va por la calle y llega a dar risa ver a la gente caminando por todos lados, con las cejas juntas, mirando el diario, la micro, mirando nada y el horizonte, pensando sólo en los problemas. ¿Qué pasa si esa persona camina por la calle tranquilamente y sólo sonríe? Se va a dar cuenta de que esa sonrisa otra persona la va a mirar y va a sonreír, y va a ser una cadena que va a provocar que la gente sonría y cambie su perspectiva y vea que, finalmente, no todo es tan malo”.