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Ricardo Lagos Weber: “Nuestra economía depende del comercio internacional”

19 Abril 2012

El senador dictó la conferencia “La experiencia chilena en negociación de TLC’s” con motivo del inicio del año académico de la carrera de Administración de Negocios Internacionales de la Universidad de Valparaíso.

“Nuestra economía depende del comercio internacional”, sostuvo el senador Ricardo Lagos Weber con ocasión de la inauguración del año académico 2012 de la carrera de Administración de Negocios Internacionales de la Universidad de Valparaíso. Lagos dictó la conferencia “La experiencia chilena en negociación de TLC’s”, destacando la importancia de los tratados internacionales para nuestro país: “Hoy Chile producto de los 28 acuerdos que tiene con 52 países, tiene un acceso preferencial a un 63 por ciento de la población del mundo, lo que es un 80 por ciento del comercio”.

El decano de Ciencias Económicas y Administrativas, Ricardo Barril Villalobos, destacó la presencia del senador: “Es de mucha importancia para la comunidad universitaria y para los alumnos. El hecho que sea un senador de la República y venga a una universidad estatal me parece muy importante”, afirmó.

Lagos Weber fue invitado a exponer el tema en consideración al activo rol que desempeñó como uno de los principales negociadores del acuerdo del libre comercio con Estados Unidos. Además, estuvo bajo su responsabilidad la negociación comercial con Brunei, Nueva Zelanda y Singapur.

Polémica YPF

En otro tema, el senador se refirió a la polémica suscitada en relación a la decisión de la presidenta argentina Cristina Kirchner de expropiar, a través de un proyecto de ley, el 51por ciento de YPF, de la compañía española Repsol. “Los países son soberanos de administrar sus políticas y sus recursos naturales. Dicho eso, la soberanía debe ejercerse con ciertos estándares mínimos, y desde ese punto de vista me parece que reconociendo el derecho de Argentina de cambiar una política, hubo formas que no ayudan mucho a entender el proceso. Por ejemplo, se dicta un proyecto de ley para expropiar, pero antes que se aprobara ya se estaba expulsando a los dueños de la empresa. Y no se ha escuchado mucho si va a haber indemnizaciones por esa expropiación”.

Desde la perspectiva de la soberanía de cada país para explotar sus propios recursos naturales, Lagos Weber sostuvo que la Concertación está actualmente trabajando en una propuesta tributaria, que según sus palabras es más potente que el royalty. “Se trata de pasar a gravar sobre rendimientos operacionales; eso es, entre las ventas y los costos. Dicho de otra forma, tratamos de capturar, cuando hay alzas muy importantes en el precio del metal, ya sea cobre u otro mineral, que el estado recaude más; y al contrario, cuando el precio cae, recaudaremos menos, pero no lo que ocurre hoy día, ya que con el impuesto actual no logramos capturar lo que se puede entender como utilidades excesivas producto de un aumento del precio”, dijo.

Reforma tributaria

Con respecto a la bullada reforma tributaria, el senador indicó que desde la Concertación han realizado una propuesta que entre otros aspectos aborda el tema del impuesto específico a los combustibles. “Lo que planteamos son tres cosas, básicamente: primero, hacernos cargo de la demanda y preocupación ciudadana; lo segundo es hacernos cargo de que hay sectores económicos que hoy no pagan el impuesto especifico a los combustibles, están exentos, y finalmente introducir un impuesto que se encargue de la contaminación”.

En este sentido, propuso: “El impuesto al petróleo diesel, que usan empresas que no están pagando: que paguen impuesto de una UTM por metro cúbico. Estoy hablando de las grandes mineras, o generadoras de electricidad, o transporte marítimo o empresas de aviación, ya que el kerosene no paga impuesto específico”.

Lagos Weber indicó que la idea es que los autos a gasolina privados reduzcan el pago de los impuestos, de seis UTM por metro cúbico a cuatro UTM, “lo que sería una rebaja significativa en el precio. Y al mismo tiempo, introducimos un impuesto nuevo, que es un impuesto a la cilindrada, para aquellos autos particulares a diesel o gasolina sobre dos mil y hasta tres mil centímetros cúbicos, que van a tener que pagar dos UTM. Y aquéllos que usan un auto mucho más grande, que consume más porque gasta más bencina o contamina más, van a tener que pagar cuatro UTM”.

El concepto, según el senador por la Quinta Región, es ampliar la base imponible. Sin embargo, no tiene mucha fe en que se lleve a cabo, “porque los que no pagaban el impuesto antes, ahora van a pagar. Los automovilistas a gasolina lo van a bajar, los a diesel no, porque tienen un impuesto súper bajo. Eso planteamos el gobierno, pero no estoy muy convencido de que los vayamos a convencer, para ser franco, pero es lo que hay”.