Su satisfacción por la convocatoria alcanzada en la tercera versión del Congreso Chileno e Internacional sobre Maltrato y Abuso Infantil, expresaron los organizadores del encuentro, cuyo propósito era constituirse como un espacio destinado a incentivar el diálogo y el intercambio de herramientas, experiencias y diagnósticos basados en evidencia empírica y buenas prácticas en la temática. La actividad fue organizada por la ONG PAICABÍ, la Escuela de Psicología de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso y la Escuela de Trabajo Social de la PUCV.
La ceremonia de clausura se realizó en el Teatro Municipal de Valparaíso, y marcó una jornada final destacada por la participación de relatores internacionales como Sherry Hamby, David Finkelhor (en modalidad on line), José Ramón Juárez, Norca Malberg y Mark Dangerfield, mientras que en el plano nacional, gran interés alcanzaron las presentaciones realizadas por Jorge Barudy y su equipo.
El decano de la Facultad de Ciencias Sociales UV, Gonzalo Lira, destacó la relevancia que ha alcanzado este congreso, situándose entre los más importantes de Latinoamérica. Al respecto, precisó que su organización “ha implicado aprendizajes relevantes para el funcionamiento de la Facultad, ya que ratifica la importancia de la activa participación en redes nacionales e internacionales de colaboración en ámbitos de investigación y experiencia profesional”.
Asimismo, dijo, “el congreso evidenció la importancia de la colaboración público privada, así como entre organizaciones de la sociedad civil y la academia. Como desafío para nuestra institución, emerge el fortalecimiento de la formación interdisciplinaria de los profesionales, ya que el diálogo entre profesiones del ámbito sanitario, justicia y protección social, resulta fundamental para el abordaje de problemáticas complejas, como la violencia ejercida sobre la niñez y la adolescencia. De este modo, los profesionales de las ciencias sociales deben tener la capacidad para integrar equipos multidisciplinarios y contribuir desde su conocimiento a la resolución integral de los problemas de familias y beneficiarios”.
Como aspecto a mejorar, el decano recalcó “la importancia de que el conocimiento científico y la investigación contribuyan de forma directa a la mejora del diseño y ejecución de la política pública en problemáticas socialmente relevantes. La difusión del conocimiento y su aplicación en busca de la identificación de buenas prácticas y modelos eficientes de intervención, resulta un aspecto central”.
Cabe señalar que las cifras globales del congreso permiten identificar una participación simultánea de aproximadamente 600 personas, que contemplaron 37 expositores nacionales y 21 internacionales, con la representación de Bolivia, Uruguay, Argentina, México, Inglaterra, España, Escocia, Estados Unidos y el Salvador. El programa contempló la realización de 30 conferencias simultáneas, diez simposios y sesenta ponencias libres, durante los tres días de duración del evento.
El Congreso Chileno e Internacional sobre Maltrato y Abuso Infantil contó con el patrocinio de la Unicef, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, la Defensoría de la Niñez y el Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, entre otras entidades. El lema de esta versión fue “Por un mundo sin abusos y un Estado garante de los derechos de los niños, niñas y adolescentes”.
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