Mauricio Celedón: “Valoro encontrarme con los jóvenes chilenos que no vivieron lo que nos tocó a nosotros”
El destacado director del Teatro del Silencio, Mauricio Celedón, estuvo durante el fin de semana pasado en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Valparaíso, liderando un laboratorio de teatro corporal e investigación en torno a la obra “Canto a su amor desaparecido”, de Raúl Zurita.
Cerca de sesenta estudiantes de teatro de la Región asistieron a las jornadas de trabajo a cargo del emblemático director, discípulo de Enrique Noisvander, alumno de Étienne Decroux, y alumno y asistente de Marcel Marceau en diferentes períodos de prácticas en Europa y Estados Unidos.
El arte de mimo, el teatro gestual y las artes callejeras cultivadas por el Teatro del Silencio fueron algunas de las principales herramientas desarrolladas durante el laboratorio, realizado en torno a la obra de Raúl Zurita y en conmemoración de los cincuenta años del Golpe de Estado de Chile.
Al respecto, Celedón señaló que “es una vuelta a Valparaíso, para un equipo pequeño del Teatro del Silencio que estamos trabajando y es un encuentro con estudiantes a nivel regional. Es muy importante encontrarme con los jóvenes chilenos que no han vivido lo que nosotros vivimos”.
Año de la memoria
“En este año de la memoria, quiero ver cómo vienen estos jóvenes, qué parte del recuerdo tienen, cómo ha transcurrido ese proceso que ha sido muy fuerte para nuestro Chile y verlo en el ámbito de lo que hago y de lo que sé hacer, que es el teatro y poder comunicarlo”, explica.
El director cuenta que en estos momentos se encuentra desarrollando un teatro comunitario: “Trabajo con jóvenes de escuelas de teatro, pero también invito a trabajar a la comunidad misma. Me gusta trabajar con la gente de la tercera edad, con niños, juntarlos con algunos que han hecho teatro y con otros que lo han hecho nunca. Y luego de ahí armar una historia con ellos para que sean parte de un acto teatral en que la memoria queda asentada”.
Según comenta “no se trata de venir con una obra, abrir y cerrar el telón: la gente lo vio, les impactó quizás o no les gustó. Podemos tener como espectadores a distinta distancia, pero cuando en un proyecto está la gente del mismo lugar y vienen los familiares y los amigos se crea otra simbiosis, otra comunión diferente con el teatro, porque desde los tiempos que lo vengo haciendo es muy interesante, queda en la memoria”.
Sobre sus proyectos actuales, cuenta que se encuentra trabajando “con la obra del poeta Raúl Zurita y con la memoria de Chile de estos cincuenta años. Quiero saber qué hay de esta memoria de las últimas cinco décadas, que ha sido, como todos sabemos, muy difícil de vivir. Yo la viví desde lejos, pero también muy de cerca, porque he vuelto muchas veces a Chile. Entonces, desde el teatro quiero saber qué siente mi país, y en qué están mis artistas chilenos de este momento histórico”.
Celedón fue un activo representante del movimiento de las artes callejeras en la década de los ochenta en España, para luego convertirse en actor por cuatro años del Théâtre du Soleil en Francia. En 1989 funda en Chile el Teatro del Silencio. Entre las principales obras del Teatro del Silencio destacan “Gargantúa”, “Malasangre”, “Alice underground”, “Taca taca mon amour” y “Hamlet”.