Matías Cortés y Carlos Tapia obtuvieron una pasantía en el Laboratorio Hacker de la Cámara de Diputados de Brasil.
E-Parliament es el nombre de la aplicación, en versión web y móvil, orientada a implementar los códigos QR en las leyes desarrollada por los estudiantes Matías Cortés y Carlos Tapia, de la Escuela de Ingeniería Civil Informática UV, con la cual ganaron el Primer Hackathon Legislativo Mundial.
En este certamen, Matías y Carlos ganaron una de las tres pasantías a la que asistirán durante agosto en el Laboratorio Hacker de la Cámara de Diputados de Brasil, considerado un espacio para promover el desarrollo colaborativo de proyectos innovadores de la ciudadanía relacionados con el Poder Legislativo, una experiencia única y vanguardista de los parlamentos frente al uso de las nuevas tecnologías.
El evento, enfocado en crear soluciones digitales, como aplicaciones móviles y herramientas de visualización de datos, fue organizado conjuntamente por la Unión Interparlamentaria, el Instituto Nacional Demócrata, el HackerLab de la Cámara de Diputados de Brasil y la Cámara de Diputados de Chile.
El Hackathon, una maratón de programación, se realizó en el marco de la Conferencia Mundial sobre Parlamento Electrónico, encuentro en el que participarán legisladores y funcionarios de Parlamentos de todo el mundo, para reflexionar e intercambiar experiencias sobre el uso de las tecnologías de la información y la comunicación.
E-Parliament
Sobre la aplicación ganadora, Matías Cortés, uno de sus desarrolladores, explica que “ingresando el número de la ley en la web o su código QR en un celular, muestra la versión completa y una simplificada o resumida al lado, como una versión explicativa, con la opción de comentar, para tener un feedback desde la ciudadanía”.
“Tiene además una opción internacional que en este momento funciona con las leyes de Chile y Brasil, pero la idea es que como la open data se está abriendo en todo el mundo, hay que analizar los web services de los distintos países y poder ir expandiendo la cantidad de países donde funciona”, agrega.
En cuanto a su utilidad, Matías asegura que “esta aplicación se puede convertir en una gran herramienta para los políticos cuando viajan a otro país y no entienden de lo que se trata una determinada ley allí. Entonces es tan fácil como poner la aplicación, el país en el cual se encuentran, el número de ley y tendrán la explicación que los puede orientar”.
En tanto, su compañero Carlos Tapia añade que “también está pensada para la gente común que algún momento tenga necesidad en relación a un cuerpo legal, por ejemplo la Ley de Tabaco, porque permite ver sus alcances, acceder a toda la ley o a una versión explicativa, es muy práctico”.
Tapia indica que “por el momento la aplicación es una maqueta funcional, pero la idea es contar con financiamiento para poder seguir desarrollándola. Estamos analizando diversas opciones, porque hay harta expectativa. Se habló mucho de cómo ampliarla, que pueda crecer como una especie de Wikipedia en torno a la ley, que serviría a abogados, estudiantes y académicos de Derecho, políticos, sociólogos, gente que le interesa el tema, que podrían ingresar y comentar las leyes. Va mucho más allá de ser una explicación de las leyes, porque da para un debate”.
La defensa de los hackers
Sobre la invitación a participar en el evento, Matías Cortés asegura que “siempre hemos estado interesados en el tema de la seguridad informática”.
Sin embargo, Carlos Tapia añade que “al hacker no hay que verlo solo de esa manera, sino desde el punto de vista de acceder a información, ser una especie de contralor de un poder muy fuerte, conectarse con la ciudadanía y tener retroalimentación, no siempre es algo tan agresivo”.
Matías señala que “como estudiantes de la UV una de las cosas más interesantes de haber ido al Hackathon fue compartir con desarrolladores de otros países, ver nuestro nivel y el de nuestros compañeros, tanto en habilidades duras como en las blandas, como técnicas, liderazgo y manejo de idioma. Se aprende de esos proyectos, porque hay intercambio a nivel cultural y de información”.
“Ir a Brasil, ver los Fablab, los Hackerlab, los proyectos con los parlamentos, es grandioso, porque vamos a volver con toda una información que podremos implementar en la Escuela de Ingeniería Civil Informática y en la propia UV”, asegura.
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