Docente de la Escuela de Derecho expuso en Décimo Congreso Mundial por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia celebrado en Roma
Rommy Álvarez se refirió al papel de los progenitores y adultos en el centro de la vida de niños y niñas y en las prácticas orientadas a su cuidado.
La profesora Rommy Álvarez, de la Escuela de Derecho de la Universidad de Valparaíso, participó recientemente en el Décimo Congreso Mundial por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia, encuentro que tuvo lugar en la Universidad de Roma La Sapienza, Italia.
El certamen se desarrolló en colaboración con la Asociación para la Defensa de los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (ADDIA) y en él se dieron cita académicos y académicas pertenecientes a instituciones de distintos países del mundo, quienes reflexionaron sobre el principio de la autonomía progresiva de las niñas, los niños y las personas adolescentes, y sus implicancias en el derecho, en la economía y en la sociedad.
Cabe destacar que la profesora Rommy Álvarez fue miembro del comité científico del Décimo Congreso Mundial por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia, encuentro donde además fue la única académica chilena en participar.
En el evento, la docente del Departamento de Derecho Civil expuso sobre "El papel de los progenitores y los adultos en el centro de vida de niños, niñas y adolescentes y las prácticas de cuidado de la infancia", centrando su presentación en una aproximación al reconocimiento jurídico de las relaciones afectivas significativas para niños, niñas y adolescentes.
Al respecto, detalló que “se trata de un tema heterogéneo, pues comprende variados supuestos: interdisciplinario, ya que su adecuado tratamiento así lo exige; múltiple, respecto las prerrogativas esenciales de niñez y adolescencia que involucra, en que la autonomía progresiva de niños, niñas y adolescentes juega un rol fundamental en el despliegue y mantención de vínculos significativos con personas distintas a sus progenitores con quienes incluso pueden no estar ligados por un vínculo de parentesco jurídico, pero si unidos por un compromiso emocional que aporta en su desarrollo y contribuye en su estabilidad afectiva; y, concentra intereses que no pocas veces se ven enfrentados, en que no podemos olvidar aquel que es prevalente”.
Rommy Álvarez sostuvo que “la idea de que para un niño, niña o adolescente el ámbito familiar no se encuentra circunscrito únicamente a las relaciones con sustento biológico, ha ido adquiriendo paulatina relevancia en los sistemas jurídicos. Esta es la idea desde la cual abordé diversos supuestos y la regulación jurídica que ha sido adoptada por diversos sistemas”.
Y añadió: “Me detuve brevemente en la situación chilena, para concluir que el dotar de efectividad a los derechos de niños, niñas y adolescentes implica reconocer en el ámbito jurídico esos vínculos afectivos relevantes que han ido afianzando a lo largo de su vida, validando con ello, además, su autonomía progresiva en el ejercicio directo de sus prerrogativas, en estos casos, en la mantención de sus lazos significativos, en respeto y consideración por sus inclinaciones y propias decisiones en que va avanzando conforme su grado de madurez, superando la premisa que son los progenitores los que deben tomar las decisiones por sus hijos e hijas maduros, sin dejar de cumplir, por cierto, con sus deberes de vela y protección, camino en que los ordenamientos jurídicos deben continuar su progreso”.
Las ideas centrales de la intervención de la profesora Álvarez fueron recogidas en las conclusiones generales del encuentro mundial, formando parte así de las temáticas en que se continuarán profundizando en el trabajo continuo de los congresos mundiales y ADDIA.
La presentación de la académica de la UV en el Décimo Congreso Mundial por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia, se puede revisar aquí.
Nota: Camila Cortez