Estudios científicos no acreditan los supuestos riesgos neurológicos que eventualmente tendrían las vacunas con etil-mercurio.
En un par de días las alertas se prendieron. La controversia se centró en el compuesto denominado timerosal, que contiene etil-mercurio, un preservante órgano-metálico que permite evitar la contaminación de las vacunas y que además es inocuo para el organismo humano.
El debate comenzó en la Comisión de Salud del Senado, que aprobó la indicación de los senadores Guido Girardi, Mariano Ruiz-Esquide y Fulvio Rossi de prohibir vacunas con timerosal por su eventual relación causal con enfermedades neurológicas como el autismo.
Sin embargo, la doctora María Fernanda Cavieres, toxicóloga de la Universidad de Valparaíso y vicepresidenta de la Sociedad de Toxicología de Chile (Sotox), tiene una mirada distinta, y fue enfática en aclarar que el timerosal no tiene ningún efecto sobre la actividad estimulante de la inmunidad. “No tiene ninguna relación, solamente actúa en la estabilización de la proteína misma de la vacuna. No conozco estudios científicos serios que avalen que las vacunas con etil-mercurio se asocien al desarrollo del autismo u otras patologías neurológicas”.
Confusión
Tal como explicó la doctora Cavieres, la controversia se puede haber generado porque erróneamente se ha confundido el etil-mercurio con el metil-mercurio, que sí es tóxico.
“En este caso, las vacunas de que estamos hablando contienen etil-mercurio, y una de las características de este compuesto es que tiene una biodisponibilidad (penetración o absorción) en el organismo bastante menor, comparado con el metil-mercurio, que sí es tóxico, mientras que el etil-mercurio no lo es. Al parecer, aquí sacaron los datos del metil-mercurio y de alguna forma los utilizaron para hacer el análisis de riesgo del otro compuesto (etil-mercurio), y eso es absolutamente incorrecto, dado que son dos moléculas distintas”.
En el pescado
La doctora Cavieres hizo un paréntesis y señaló que el metil-mercurio se podría encontrar también en algunos pescados. De ahí que se recomienda a las mujeres embarazadas no consumir productos marinos que provengan de zonas contaminadas. “El mercurio que contienen los pescados es metil-mercurio, no etil-mercurio. Las mujeres embarazadas no debieran consumir pescados provenientes de zonas contaminadas con metil-mercurio por ser neurotóxico. Esto se da más en los pescados grasos como el salmón y el atún”.
Vacunar con confianza
Finalmente, María Fernanda Cavieres hizo un llamado a la calma y recomendó a los padres vacunar a los niños con plena confianza.
“Los estudios epidemiológicos han demostrado que no hay ninguna relación entre la vacunación y el autismo. Las vacunas incluso han permitido erradicar una serie de infecciones, por lo tanto desde el punto de vista de salud pública la vacunación es extremadamente eficaz para proteger la salud de las personas. De ninguna manera hay que dejar de vacunarse”.
Como dato adicional, la doctora Cavieres recalcó que en aquellos países que han cambiado las vacunas con timerosal por otros compuestos, el autismo ha continuado detectándose de igual forma. Por lo tanto, “en estos momentos con la información que se maneja del tema, creo que no es necesaria la indicación de prohibición del uso de timerosal en las vacunas”, concluyó.
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