Alessandra Olivi dio a conocer la experiencia del Observatorio Comunitario de Gestión y Control de la Información Territorial.
“Desigualdades comunitarias en América Latina” se tituló la ponencia que presentó Alessandra Olivi, académica de la Escuela de Sociología y profesora vinculada al Centro Gerópolis de la Universidad de Valparaíso, en el Pre-Congreso Virtual de la Asociación Internacional de Gerontología y Geriatría, uno de los eventos más importantes a nivel mundial en el ámbito del envejecimiento y la vejez. La docente abordó la experiencia del Observatorio Comunitario de Gestión y Control de la Información Territorial y su aplicación móvil DIMEapp, iniciativa diseñada por el Centro Gerópolis en el marco de la adjudicación de fondos del Concurso Nacional de Validación de la Innovación Social 2018 de CORFO.
Alessandra Olivi formó parte del simposio “Envejecimiento y desigualdades en América Latina”, junto a Enrique Vega, jefe de la Unidad Curso de Vida Saludable de la Organización Panamericana de la Salud-Organización Mundial de la Salud, y Albert Esteve, director e investigador del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad Autónoma de Barcelona. El espacio fue moderado por Norah Keating, reconocida gerontóloga social e investigadora asociada a las universidades de Alberta (Canadá), de Swansea (Reino Unido) y del Noroeste (Sudáfrica).
En opinión de la académica, la participación en esta instancia contribuye a abrir espacios de reflexión en torno a la gerontología, orientados a las dimensiones sociales y ambientales que inciden en la calidad del envejecimiento. A su vez, sostuvo que existe una baja representación de las ciencias sociales en este ámbito de estudio, “por lo tanto, es muy relevante la creación de estos espacios donde empieza a cobrar importancia la dimensión de la construcción social del envejecimiento, de un análisis que tenga en cuenta todos los aspectos sociales que intervienen en este proceso”.
Movilidad, participación y calidad de vida
La función del Observatorio Comunitario de Gestión y Control de la Información Territorial es validar y mejorar el registro del Sistema de Información de Salud Territorial para el Adulto Mayor (SISTAM) de Gerópolis, específicamente en lo referido a las condiciones físicas del entorno urbano donde residen las personas mayores, que afectan o favorecen su movilidad cotidiana y calidad de vida. El Observatorio se configura como un proyecto de innovación social con base comunitaria, en el que las personas mayores y otros integrantes de la comunidad reportan las condiciones del equipamiento, infraestructura y mobiliario urbano mediante la aplicación móvil de georreferenciación DIMEapp.
El Observatorio busca promover la participación de las personas mayores en la generación de información relevante sobre la situación territorial y la satisfacción de las necesidades de movilidad, co-crear soluciones para el reporte y actualización de información territorial e incrementar la capacidad de la administración local para mejorar las condiciones ambientales de los barrios.
La desigualdad a escala barrial
La doctora en Antropología Social señaló que “existen desigualdades estructurales, es decir, dependen del Estado y de la estructura social, de la política del país, por ejemplo, el sistema de pensiones, las condiciones de acceso a la salud de la población o la misma estructura educativa. La posibilidad de intervenir estas desigualdades refiere a un orden más bien de política pública. Sin embargo, hay otros órdenes de factores que son más accesibles en términos de intervenciones localizadas, a los cuales podemos aportar mediante soluciones que buscan mejorar el entorno comunitario, que están al alcance de una municipalidad o de instancias regionales”.
Al respecto, indicó que el Observatorio y su aplicación DIMEapp contribuyen a crear un mecanismo de levantamiento de información centrado en la persona: “No es un mecanismo de información basado simplemente en un modelo ideal de ciudadano o ciudadana, sino que está basado en problemas o dimensiones espaciales, barriales, territoriales, que afectan directamente la vida social, la participación y la accesibilidad de las personas mayores”.
Por otra parte, sostuvo que esta iniciativa posibilita que los gobiernos locales tomen decisiones que estén a su alcance y de manera focalizada. Además, hizo hincapié en el principio básico de la intervención territorial para acondicionar las ciudades a las personas mayores, el cual propone que un entorno barrial adaptado a las exigencias de la población mayor aporta al desarrollo de ciudades más accesibles y amigables con todos los grupos de edad.
Finalmente, recalcó que “aquí tenemos que romper un poco el mecanismo de sectorializar este tipo de intervención, es cierto que son intervenciones que responden a una lectura del territorio realizada por personas mayores según sus necesidades específicas, sin embargo, benefician en conjunto a toda la población y más aún cuando todas las personas aspiramos a envejecer en buenas condiciones, manteniendo nuestra autonomía, nuestras posibilidades de desplazarnos, de tener una movilidad segura y de poder seguir siendo parte de la sociedad”.
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