Afirmó filósofo Miguel Ángel Quintanilla, doctor Honoris Causa por la UV, en lanzamiento de su libro “Filosofía ciudadana”.
Convocado por Anilla Cultural Nodo Uruguay, recientemente tuvo lugar el lanzamiento iberoamericano del libro “Filosofía ciudadana”, del profesor Miguel Ángel Quintanilla, quien fue nombrado doctor Honoris Causa por la Universidad de Valparaíso en 2011. En la presentación participó el doctor Marcelo Arancibia, director del Instituto de Filosofía de la UV.
En palabras del autor, “tenemos los mejores instrumentos que nunca ha tenido la humanidad para entender el mundo y para transformarlo de acuerdo con nuestros deseos. Pero no tenemos tiempo para pensar en el mundo que tenemos y no somos capaces de formular deseos o planes de vida que nos parezcan plenamente satisfactorios durante un intervalo de tiempo significativamente mayor que el que necesitamos para formularlos. Por eso creo que una de las tareas más urgentes de nuestra época es la de recuperar la capacidad de pensar, una parte al menos de la más ambiciosa meta de la Ilustración: pensar para saber, saber para poder, poder para hacer lo que queremos”.
Asimismo, dijo el investigador, su objetivo es que la ciencia y la tecnología sean accesibles para todo el mundo “y no solamente para los chamanes de la tribu”.
En su intervención, que cerró la sección de invitados especiales al lanzamiento, Marcelo Arancibia se refirió al legado del profesor Quintanilla para el pensamiento iberoamericano, su contribución a la filosofía de la cultura, la política científica tecnológica y la innovación de la región iberoamericana, y su constante interés en acercar la filosofía a territorios y ciudadanos.
Destacó Arancibia que “Filosofía ciudadana” es un libro “que se digiere muy rápidamente; sin embargo, lo que yo quiero hoy mostrar es que da cuenta de las bodas de oro de la investigación del maestro Miguel Ángel Quintanilla, con quien tuve el privilegio de trabajar en mi trabajo de máster y doctoral. (…) ‘Filosofía ciudadana’ es una excelente noticia para los ciudadanos iberoamericanos. (…) Imagino que nadie se ha sorprendido del trabajo de Miguel Ángel, ya que a mi juicio representa las grandes preocupaciones de la investigación del profesor, que tienen que ver con sus agudas, claras y distintas preocupaciones y reflexiones filosóficas relacionadas con la ciencia, la tecnología, la innovación, la educación, la cultura y la dimensión política de las mismas; esto es, su análisis, gestión, diseño, proyección, impacto y difusión y comunicación pública”.
Subrayó el valor del legado de Miguel Ángel Quintanilla “y su constante preocupación por la educación en general, en el aspecto formal y no formal de la misma. Específicamente, por la educación y la enseñanza de la filosofía. (…) Es una invitación, por lo demás, a nuestros estudiantes, pero también a quienes no han decidido disciplinarmente dedicarse a la filosofía: eso es filosofía ciudadana. Es una invitación (…) a integrar siempre las humanidades con la ciencia y la tecnología”.
El director del Instituto de Filosofía de la UV cerró su intervención diciendo al autor: “Muchas gracias por todo, gracias por ‘Filosofía ciudadana’. Eres un bioartefacto entrañable”.
También intervinieron en el acto de presentación del libro Juan Carlos Toscano (OEI Organización de Estados Iberoamericanos), Raúl Fornet-Betancourt (Universidad Técnica de Aquisgrán, Alemania), Martín Parselis (UCA, Argentina), Carmelo Polino (Centro Redes, Argentina y Departamento de Filosofía, Universidad Oviedo, España), Mario Albornoz (RICYT Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología) y Carina Cortassa (UNER), además del propio Miguel Ángel Quintanilla. Moderadores del evento fueron Santiago López (USal eCyT) y Delma Rodríguez (InfoArt y Anilla Cultural).
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