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Facultad de Ingeniería implementa la Semana de la Pausa Activa

23 Junio 2020

Talleres de autoregulación, gestión del tiempo, meditación, control de ansiedad y yoga forman parte de la programación.

Una intensa programación de “descompresión académica” ha puesto en marcha la Facultad de Ingeniería a través de la denominada Semana de la Pausa Activa, que se realiza hasta este viernes 26 de junio, dedicada a estudiantes y académicos de todas las escuelas que la integran, organizada en conjunto con el Programa de Acompañamiento a los Primeros Años, APPA.

Las actividades comenzaron el lunes 22 con talleres de relajación y meditación dirigidos a estudiantes de primer y segundo año, mientras que este martes 23 se desarrolló el taller “Gestión del tiempo para el logro de los objetivos académicos”, para estudiantes de primer año, y una sesión de yoga para todos los niveles.

Este miércoles 24, de 15 a 16 horas, se desarrollará el taller de relajación y meditación para alumnos de tercero a quinto año, en tanto, el jueves 25, de 10 a 13 horas, se realizará el taller de autorregulación emocional, dirigido a primer año, y de 15:30 a 17 horas, el taller de control de ansiedad, dirigido a cuarto y quinto año.

La Semana de Pausa Activa finaliza el viernes 26 con un taller de autorregulación emocional para alumnos de segundo y tercer año, de 10 a 11:30 horas, y un taller de relajación y meditación, de 12:30 a 13:30 horas, para segundo y tercer año.

Gina Vindigni, académica de la Escuela de Construcción Civil y secretaria de Facultad, señala que “este tipo de iniciativas buscan ayudar a profesores y estudiantes para que puedan transformar su metodología habitual al teletrabajo y las clases online, adaptando el contenido y la forma de presentación con un tiempo más restringido, proceso que no ha sido sencillo, al cual además se debe agregar la problemática de la situación país”.

“La idea es que nuestros estudiantes y académicos tomen este espacio como una manera de reorganizar su tiempo, no es una semana de vacaciones, sino más bien una pausa, para dar apoyo y soporte a la comunidad académica. Este año no tuvimos semana mechona, entonces esta idea busca guiarlos para que puedan organizar sus tiempos y dar mejor respuesta a las exigencias universitarias”, agregó.

En tanto, Daniel Miranda, director de la Escuela de Ingeniería Industrial y uno de los principales impulsores de la iniciativa, señala que el objetivo es “generar una descompresión académica en base a las necesidades de los estudiantes y académicos. Muchos de ellos han visto mermada la calidad enseñanza-aprendizaje debido que están en clases conectados en sus piezas o el comedor, con todo lo que eso implica”.

“Además, se calcula que un académico debe invertir tres veces más el tiempo para preparar una clase virtual, versus una presencial. Entonces nos interesaba dar respuesta a esas necesidades de los estudiantes con una semana sin clases, pruebas o trabajos. Los mismos centros de estudiantes se han organizado y han realizado conversatorios sobre diversos temas y estamos en conversaciones con la Vicerrectoría Académica para tener dos semanas similares en el segundo semestre, en octubre y diciembre, porque esta iniciativa has sido muy bien acogida tanto por los académicos, como por los estudiantes”, agregó.