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Académicos de Psicología realizaron observaciones al proyecto de ley sobre protección en salud mental

04 Julio 2018

Docentes e investigadores Carlos Clavijo y Javier Morán expusieron su parecer ante la Comisión de Salud del Senado.

Una serie de observaciones al proyecto de ley en segundo trámite constitucional sobre protección de la salud mental en Chile formularon los académicos e investigadores de la Escuela de Psicología de la Universidad de Valparaíso Carlos Clavijo y Javier Morán.

Ambos especialistas fueron invitados a exponer en calidad de expertos ante la Comisión de Salud del Senado, instancia en la que se refirieron -por igual- a los aspectos positivos y negativos que a su juicio considera el señalado cuerpo legal.

Carlos Clavijo, quien es doctor en Psicología por la Universidad de Monash (Australia) y en la actualidad dirige el Magíster en Psicología Clínica de la Escuela de Psicología de la UV, orientó su análisis hacia los ámbitos de la prevención y la intervención en personas adultas, en tanto que Javier Morán, quien es magíster en Psicología de la Adolescencia, presentó indicaciones concernientes al área del manejo y la contención de niños y jóvenes.

Aspectos positivos

En términos generales, los docentes de la UV destacaron favorablemente el hecho de que se esté elaborando un marco legal tendiente a fortalecer la salud mental, toda vez que la Organización Mundial de la Salud considera a Chile como uno de los países con mayor carga de morbilidad por enfermedades mentales, dado que el 23,2% de su población padece trastornos de ansiedad o depresión, patologías que también están muy asociadas al alcoholismo y a las agresiones intrafamiliares.

Asimismo, valoraron que la propuesta de ley considere la protección de los derechos de las personas con problemas de salud mental, en especial en lo relativo a la internación psiquiátrica involuntaria.

Debilidades

Sin embargo, tanto el profesor Clavijo como el profesor Morán manifestaron sus reparos en dos áreas que calificaron de “claves” en el tema de la salud mental: la falta de financiamiento y la ausencia de políticas y procedimientos enfocados a la prevención.

Respecto de esta última, ambos argumentaron que el concepto está ausente en el proyecto de ley y, por consiguiente, ello no se condice con el interés de los legisladores por prevenir las enfermedades mentales.

“En la propuesta la palabra prevención sólo se menciona en el artículo 17, en relación con evitar el uso de contención física de comportamientos agresivos y perturbadores. Creo que una ley de salud mental no puede pasar por alto este tema”, afirmó Carlos Clavijo.

Y en cuanto al financiamiento, los académicos de la Escuela de Psicología de la UV sostuvieron que éste es un aspecto fundamental por considerar en la nueva normativa, ya que en nuestro país se invierte sólo el 2,78% del PIB en salud mental, contrastando, por ejemplo, con Canadá, que invierte el 6,2%.

Otra observación que plantearon los docentes de la UV fue la falta de especialistas idóneos para trabajar con pacientes afectados por patologías mentales, en especial con niños y adolescentes.

“Este proyecto no hace implícita la necesidad de trabajar de la mejor manera posible, es decir, desde la mejor evidencia y bajo un marco legal que promueva que tanto el manejo como las intervenciones estén a cargo de profesionales especializados en el área infanto-juvenil y no que provengan del área adultos, que en su mayoría carecen de la experiencia necesaria. Además, la nueva ley incorpora un artículo, el 26, que habla sobre acciones orientadas al aislamiento de estos pacientes. Esto llama la atención, ya que toda la experiencia revela que esta solución no debiera proponerse para menores y jóvenes. Me parece que el proyecto está escrito para adultos y no pensando en los niños y adolescentes. Y esto es un gran problema”, sentenció Javier Morán.