La iniciativa busca fomentar y reflexionar sobre políticas públicas de inclusión al interior de las comunidades universitarias.
Durante esta semana se realizaron las primeras “Jornadas de inclusión y accesibilidad de las universidades del CRUV”, iniciativa que se desarrolla desde hace cinco años, pero que en esta oportunidad ha reforzado un desafío conjunto de las cuatro universidades tradicionales de la zona (agrupadas en el Consejo de Rectores de Valparaíso) bajo un modelo de aprendizaje y reflexión que estimule la inclusión en las comunidades universitarias.
Durante tres días se realizaron ciclos de reflexión, ferias tecnológicas y actividades lúdicas que permitiese mostrar aquellos aspectos prácticos de las iniciativas inclusivas.
La Feria Tecnológica de Inclusión, realizada en la UTFSM, comprendió actividades desarrolladas por los propios estudiantes de las instituciones del CRUV y tuvo por objeto exponer los diversos productos que han dispuesto como servicio para los estudiantes que tienen alguna discapacidad.
Para Vivian Heyl, coordinadora de Inclusión de la División de Educación Superior del Ministerio de Educación, “esta jornada tiene un gran valor porque está dentro de una de las prioridades del Ministerio de Educación en todos sus niveles para trabajar el tema de la inclusión en las instituciones de educación superior y se ha hecho un trabajo más cercano con las universidades estatales y las universidades del Consejo de Rectores”.
Añade que “la inclusión tiene un significado muy relevante, que no es solamente por motivos socioeconómicos, que se han trabajado a través de gratuidad y otros beneficios estudiantiles, sino además hay una inclusión en el más amplio sentido, donde se busca que no existan barreras para el acceso, permanencia y egreso de estudiantes por ningún tipo de situación, ya sea en temas de interculturalidad, inmigración, discapacidad y también por motivos de género y diversidad sexual”.
Por su parte, Daniel Concha, director del Servicio Nacional de la Discapacidad, Senadis, dijo que “estas jornadas son muy importantes porque es una manera de ver lo que se ha avanzado, pero también los desafíos pendientes en los cuales tenemos que seguir mejorando con el diálogo a través de los estudiantes y las autoridades, para hacer una universidad inclusiva. Y el Senadis va a seguir entregando apoyo”, explica.
Resaltó el diálogo surgido en las jornadas con la intervención de los distintos actores y representantes de los programas inclusivos para ir adecuando nuevas iniciativas y formular ideas que buscan profundizar las acciones para que las universidades desarrollen actividades inclusivas con el objeto de atender a las demandas de las personas que tienen discapacidad y que desean acceder a la universidad.
En este sentido, las universidades del CRUV han comprometido a través de estos espacios desarrollar actividades públicas de inclusión con un programa operativo que incluyó la realización de un diálogo denominado “Desafíos de la inclusión en Educación Superior”, en la Escuela de Ingeniería Química de la PUCV; una feria Inclusiva Tecnológica y Muestra Goalball en la UTFSM; una clínica de tenis de mesa en el Polideportivo de la Universidad de Valparaíso, y una zumbatón denominada “Me sumo a la inclusión”, en el gimnasio de la UPLA.
“La idea es visibilizar el tema como Consejo de Rectores de la Universidad de Valparaíso, dejar de lado el trabajo al interior de las instituciones y optar por un esfuerzo colaborativo, pero ahora hacemos esto de forma más evidente hacia la comunidad, porque eran trabajos de acompañamiento, apoyo, capacitación para docentes y estudiantes, entonces el resto de la comunidad no sabía lo que hacíamos, pero aquí estamos dando una señal que queremos compartir lo que hemos avanzado”, explica Pierina Penna, de la Universidad de Valparaíso, presidenta de la Comisión de Inclusión del CRUV.
En la misma dirección, el presidente de la Comisión Macro del CRUV, Alejandro Rodríguez, resalta que “esta actividad, al igual que todas las actividades que este año hemos desarrollado con las diversas comisiones del Consejo de Rectores de Valparaíso, corresponde a la búsqueda de reforzar y reinstalar en Valparaíso el concepto de universidad universitaria y el propio hecho que existe el CRUV y una instancia de coordinación de las cuatro universidades es un elemento diferenciador de la región y, en particular, de la ciudad de Valparaíso con respecto a otras ciudades que tienen universidades”.
Agrega, además, que “esta coordinación y trabajo conjunto y las posibilidades que tienen los estudiantes para desarrollar asignaturas en cualquiera de las universidades que está proponiendo el CRUV, es una característica que apunta a fortalecer el concepto de ciudad universitaria en Valparaíso”.
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