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Puentes de fideos desafían el ingenio de constructores

01 Junio 2017

Estudiantes de primer año fabricaron estructuras que fueron sometidas a pruebas de peso-resistencia.

Creatividad, soluciones a diversas problemáticas, trabajo en equipo y liderazgo fueron algunos de los aspectos evaluados en la actividad de elaboración de puentes de fideos que realizaron estudiantes de primer año de la Escuela de Ingeniería en Construcción, como parte de la asignatura de Introducción, dictada por los académicos Gina Vindigni, Gianella Adofacci y Andrés Jamet.

Durante el evento, que congregó a gran cantidad de alumnos en los laboratorios de la carrera en Playa Ancha, los puentes de fideos fueron presentados por sus constructores, para posteriormente ser sometidos a una prueba de peso-resistencia, para evaluar su capacidad frente a diversas cargas.

Spaghetti y pegamento

Gina Vindigni, una de los académicos que dictan la asignatura, explica que la actividad “contempla la aplicación de una rúbrica para evaluar cómo los estudiantes logran explicar este proceso, intuyendo ciertos términos de estructura y logrando encontrar soluciones a una problemática. Como ingenieros constructores, siempre van a tener que trabajar sus proyectos en función de especificaciones y tienen que seguirlas, por eso la evaluación parte con la medición del puenteo, que debe estar dentro de las medidas exigidas”.

Entre los requerimientos para las estructuras se contaban que la carpeta, es decir, el sector donde transitan vehículos y personas, fuera curva. La altura mínima debía sere de 15 centímetros, porque la idea es que fuera un puente fluvial por donde pasaran barcos, por lo cual los alumnos no podían poner una estructura para hacerlo más resistente. El ancho de la carpeta tenía que ser de 10 centímetros y la luz del puente, que es la distancia longitudinal entre los ejes de apoyo de la superestructura, no podía superar los 45 centímetros.

Al respecto, la profesora Vindigni indicó que “la estructura sólo podía contener fideos y pegamento, sin incorporar ningún otro tipo de material y para eso los estudiantes debían realizar un trabajo de investigación, para analizar qué tipo de construcción reaccionaría mejor. La ingeniería en construcción siempre tiene que dar respuestas creativas y en el momento oportuno, de eso se trata este trabajo”.

Los criterios de la evaluación

El último desafío que debieron sortear las estructuras fue la razón peso-resistencia. Al respecto la académica aclara que “se aplica la carga en el centro de masa, con una poruña que va incorporando arena, haciendo que se cargue el puente en ese punto hasta que colapsa y se produce la rotura, como pasó con la mayoría, que tendieron a torcerse”.

En este sentido, Vindigni añadió que “la evaluación consta de varios criterios como la expresión oral, porque tienen que explicar el proceso con un vocabulario técnico y coherente. Otros aspectos a evaluar fueron la prolijidad del trabajo, cumplir con las especificaciones que se indicaron y ubicarse en el rango del coeficiente del peso-eficiencia”.

Según explica Vindigni, “este tipo de actividades tiene por objetivo que los estudiantes de primer año se motiven con la carrera y asimilen este tipo de desafíos a lo que va a ser su vida profesional. Ahora es una estructura de fideos, pero el hecho de conectarse con la idea del puente los lleva a hacer análisis estructurales, asociando criterios para poner atención en detalles con una visión crítica de entender dónde, cómo y por qué se fisuró”.