Con lecturas dramatizadas y foros se realizará la Primera Muestra de la Mención de Dramaturgia de la Escuela de Teatro UV.
La noche de los clubes nocturnos viñamarinos, el catolicismo y la homosexualidad, la analogía entre la industria de la carne y la mujer, y la vida del altiplano chileno que pierde sus costumbres Aymara son los cuatro temas de las lecturas dramatizadas que se presentarán en la Primera Muestra de la Mención de Dramaturgia de la Escuela de Teatro UV.
La actividad, que se realizará los días miércoles 5 y jueves 6 de octubre a las 20 horas en la Sala Negra UV (Avenida Brasil 1647, Valparaíso), nace de los propios estudiantes de la Mención en Dramaturgia con el propósito de visibilizar y compartir el resultado de los procesos académicos desarrollados junto a sus profesores.
Organización estudiantil
Roberto Mancilla, estudiante y autor de la obra “San Sebastián, el mártir de los colas”, explica que “lo que más me interesa es poder mostrar este trabajo. Más allá de que tenga un plus o no, es un trabajo hecho y es muy importante poder enseñárselo a la gente, sobre todo en instancias como éstas, que son por iniciativa de los mismos estudiantes“.
La organización del evento está a cargo de las estudiantes de la Mención de Producción Teatral y la puesta en escena de las lecturas dramatizadas de las obras ha sido realizada por estudiantes de la Mención de Dirección con el objetivo de promover el trabajo de sus compañeros dramaturgos y poner en práctica las herramientas y conocimientos de las diferentes áreas.
Formación de audiencias
El dramaturgo y director de la Escuela de Teatro UV, Cristián Figueroa, destaca el interés por la participación y la asistencia de público a este proyecto impulsado por los alumnos.
“Estas experiencias son fundamentales para que los estudiantes y jóvenes escritores puedan mostrar su trabajo. La lectura dramatizada es un proceso en que dramaturgos y directores teatrales intercambian frente al público detalles de cómo se realiza el traspaso de material escrito al espacio escénico”, asegura.
Figueroa agregó que incluso la actividad tiene como objetivo lograr un impacto fuera de las salas de clases. “Se pretende que este tipo de actividad sea una instancia interesante para la formación de audiencias y el desarrollo de una cultura teatral en Valparaíso”, añadió.
Cada día se realizarán dos lecturas dramatizadas y un foro de conversación abierto al público, en el que participarán actores, autores, directores y dramaturgos de las obras, junto a panelistas invitados.
Las obras
La muestra incluye la obra “San Sebastián, el mártir de los colas”, con dramaturgia de Roberto Mancilla, estudiante cuarto año, Mención Dramaturgia. Según su propio autor, la obra es un rito donde María relata, Jesús nos sana, los ángeles cantan y Sebastián decide emprender su último vuelo.
La segunda pieza es “Arcadas”, con dramaturgia de Javiera Lagos, actriz egresada de la Escuela de Teatro UV. La obra es una compilación de testimonios del submundo del comercio sexual, extraídos a partir de un trabajo de infiltración de la dramaturga en el mundo de los clubes nocturnos viñamarinos, donde las protagonistas son trabajadoras sexuales, topleras y cafeteras.
“Jugadores” es otra de las obras que se presentan, con dramaturgia de Marian Mickman, estudiante cuarto año Mención Dramaturgia. Según la propia autora, la obra indaga en el poder de la industria de la carne versus la industria de la figura femenina, buscando significar las relaciones de aquello aparentemente tan abstracto, pero que sin embargo está presente en lo cotidiano.
La muestra finaliza con “Achachinaja”, con dramaturgia de Rubén Moscoso, actor egresado de la Escuela de Teatro UV, Mención en Dramaturgia. La obra se sitúa en el altiplano chileno, donde una familia Aymara se encuentra en tensión: los viejos mantienen una relación fría donde ya no hay comunicación, los hijos han dejado la vida rural por la vida citadina y las tradiciones comienzan a quedar en el olvido. La reciprocidad de género, una de las bases fundamentales de esta cultura, se pone en entredicho, mientras que un niño perdido en el tiempo y el espacio se pregunta por su cultura, su lengua y la idea de “patria”.
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