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Neurobióloga abre centro para hacer ciencia entretenida

11 Octubre 2013

El innovador programa permite a alumnos de escuelas públicas de sectores vulnerables de Valparaíso, desarrollar proyectos científicos en acuaponía, neurociencia, genética, fabricación de hornos solares, energía eficiente y elaboración de biogás a partir de desechos orgánicos, entre otros.

¿Es posible hacer ciencia en forma entretenida? Sí. La directora del programa Ciencia Al Tiro y profesora del Centro Interdisciplinario de Neurociencia de la Universidad de Valparaíso, doctora Kathleen Withlock, ha demostrado que se puede reencantar a los niños con la ciencia. ¿Cómo? A través e innovadores talleres que utilizan la ciencia básica para luego pasar a la experimentación.

Niños de entre nueve y doce años de la Escuela Pacífico de Playa Ancha han realizado talleres de acuaponía, neurociencia, genética, fabricación de hornos solares, energía eficiente y elaboración de biogás a partir de desechos orgánicos, entre otros. Además han trabajado con moscas del vino y peces cebra para entender la genética y el funcionamiento del cerebro del ser humano.

Todo ello en el marco del programa Ciencia Al Tiro, que desde el año 2008 hace difusión de esta disciplina con escolares de bajos recursos de la parte alta de Playa Ancha, y cuyo objetivo es apoyar la enseñanza de ciencia en las escuelas municipalizadas.

Este programa es financiado por la Iniciativa Científica Milenio y la Universidad de Valparaíso.

Edificio Verde

Hoy miércoles, en una emotiva ceremonia, se inauguró la nueva casa de Ciencia Al Tiro: el Edificio Verde, una casona histórica del cerro Playa Ancha, la cual ha sido diseñada para incorporar tecnologías eficientes y sustentables en un hermoso espacio de trabajo, cuyo objetivo es continuar con los talleres semanales de ciencia con escuelas públicas y ser un espacio disponible para talleres, charlas y actividades que promuevan el intercambio de ideas a nivel local, nacional e internacional.

“La idea es que los estudiantes aprendan a hacer experimentos, pero también cómo trabajar con los equipos que tenemos aquí. La ciencia está en todas partes, eso significa que los estudiantes pueden aprender los procesos y cómo resolver un problema de manera práctica. Creo que falta el entendimiento de los procesos y el diseño de los experimentos. Al trabajar con este tipo de equipos los niños pueden tener una apreciación de que la ciencia puede ser súper interesante, ‘bacán’, divertida, es decir, no es una cosa fome”, sostuvo Kathleen Withlock.

Tal como lo explicó la neurobióloga, el Edificio Verde no sólo es un espacio óptimo para hacer ciencia: además es una construcción absolutamente sustentable, donde se trabajó con material reciclado e implementación de ecotecnología, que permite ahorro energético y calefacción de la casa e invernadero en toda su extensión.

Diseño que habla de Valparaíso

Pero, por sobre todo, su diseño interior habla de Valparaíso: vigas a la vista de pino oregón reciclado, junto a otras maderas nobles, un tragaluz, murales del destacado artista Eduardo Mena y la característica lata ondulada que reviste las casas del puerto. Subiendo al segundo piso, destaca tanto por su belleza como por su formato, el antiguo vitraux de la Iglesia La Merced, una verdadera joya del puerto, una obra de arte, cuyo ensamblado está hecho en madera.

El patio cuenta con el invernadero donde se desarrollará la acuaponía, una innovadora tecnología que países como Estados Unidos y Australia, por la falta de agua y por la creciente demanda de comida saludable —ya que no se usan pesticidas— desarrollan hace un par de años.

“La acuaponía es una combinación de hidropónico y acuicultura. Los peces tienen desechos, que se pueden usar como fertilizantes de las plantas, y las plantas se pueden usar para limpiar el agua. Por las bacterias que existen en el sistema, cambian el amonio (que es tóxico en los peces) a nitrato, que es un buen fertilizante para las plantas. Al circular por las raíces de las plantas absorben los nitratos, limpian el agua y la devuelven limpia a los peces”, explicó la directora de Ciencia Al Tiro.

“Un país sin ciencia es un país cojo”

Por su parte, el doctor Ramón Latorre, director del CINV de la Universidad de Valparaíso y Premio Nacional de Ciencia, señaló: “Un país sin ciencia es un país cojo. Y este país tiene poca ciencia. Este tipo de proyectos que está guiando Kate es un proyecto que llega a los niños, y es ahí donde uno tiene empezar a enseñar la ciencia para que eso se proyecte y llegue finalmente a una ciencia que no solamente tenga una cosa cultural, sino que además llegue a la innovación y el país cambie, considerando que si en nuestro país se nos acaba el cobre, qué vamos a hacer si no tenemos ciencia”.

Latorre agregó que lo más importante de todo esto es despertar desde muy pequeños la curiosidad en los niños. “La curiosidad es algo fundamental; es decir, ¿cómo funcionan las cosas? Si uno aprende de pequeño cómo funcionan las cosas jugando, después va a seguir jugando toda la vida descubriendo. Y el descubrir produce solamente riqueza a un país. Lo único que tiene un valor agregado es el conocimiento”.

Hito para Playa Ancha

A su vez, el seremi de Energía, Rodrigo Sepúlveda, indicó que esta inauguración es un hito importante para Playa Ancha. “Es muy destacable todo el trabajo que se va a realizar con los niños, para enseñar cómo se puede aplicar la ciencia en el diario vivir. Desde el punto de vista de la energía tiene un tremendo aporte. Hemos visto cómo se han instalado vidrios dobles, lo cual tiene un inmenso apoyo en mejorar la aislación térmica del edificio; esto permite economías cercanas al 50 por ciento en todo lo que son los gastos de calefacción. También el sistema solar térmico apoya al ítem calefacción. Es un sistema renovable y eficiente. Iluminación led, eficiente. Es un lugar que reúne una serie de elementos que van en beneficio del medio ambiente, y aplicando una serie de conceptos energéticos que demuestran cómo Valparaíso y Chile pueden avanzar en esta materia”.

A la ceremonia de inauguración asistieron el rector de la UV, Aldo Valle; el director del CINV, Ramón Latorre; los seremi de Energía, Rodrigo Sepúlveda, y de Cultura, Rafael Torres; el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, e investigadores del CINV, alumnos de los talleres y la directora y profesores de la Escuela Pacífico.